Hay que volver a los años 90 y a la fiesta de Mario Conde en Banesto para encontrar una fianza a directivos financieros similar a la que ayer dio a conocer la Audiencia Nacional. Impone el juez 10,5 millones a los cuatro directivos de Novacaixagalicia imputados, y deja al copresidente, Julio Fernández Gayoso, la dolorosa responsabilidad de avalarlos a todos ellos si no son capaces de poner el dinero. Las fianzas dictadas son sonrojantes (por elevadas) porque sonrojantes (por elevadas) eran las indemnizaciones cobradas por esos señores. Es este un auto judicial a la altura del escándalo generado. Un aviso a navegantes, a una banca que sigue despachando bonus mientras miran desde su despacho a desahuciados y estafados por las preferentes. Y dirán que es demagogia...