Y a no hace falta una guerra de sucesión a la Corona española para obtener ventajas estratégicas y de negocio en nuestro territorio. Es suficiente apenas con una hiperbólica promesa de doscientos mil puestos de trabajo para que en una parte de España se pretenda establecer una legislación específica y diferente de la que impera en el territorio patrio. Pretendiendo, bien en términos de salud, impositivos o de regulación laboral, que la legislación del Estado pueda ser transformada o derogada, con el atractivo objetivo de que un territorio de la Meseta castellana, adscrito al Madrid DF de Gallardón, Aguirre o Ignacio González, de sostenidas mayorías absolutas, se convierta en el condado de Adelson o en el peñón de Eurovegas.
Se desconoce todavía si será el Instituto de Crédito Oficial el que proveerá los miles de millones de euros, con crédito español, que sus promotores reclaman para llevar adelante el proyecto. También se desconoce si el aeródromo privado de uso exclusivo para los clientes del condado o del peñón será de nueva construcción o se transferirá alguno de los existentes, ya de capa caída en su actividad dado el empobrecimiento del país y abandonada la aventura olímpica 2020.
Queda por resolver si el control de aduanas, la vigilancia del crimen, el control del tráfico de estupefacientes y de los hipotéticos delitos de cuello blanco será también externalizado y sustraído a las fuerzas de seguridad del Estado. Más seguras parecen las exenciones fiscales para propietarios y usuarios, y se contempla como alternativa a la ley antitabaco el uso potestativo de caretas antigás por los no fumadores, compatibilizando así la exigencia de fumar de los promotores con la prioridad de creación de empleo que mantiene en ascuas a dos Gobiernos y muy particularmente a la ministra de Sanidad del Reino de España. También se desconoce el radio de alcance, más allá del territorio específico del peñón de Eurovegas, de la prohibición del juego on-line. Parece seguro que en dicho territorio, y zonas colindantes, no se permitirá la actividad de Alcohólicos Anónimos, ligas antitabaco, asociaciones contra la ludopatía? Se duda incluso de que la anunciada tarjeta unificada sanitaria -cuánto retraso- pueda ser allí utilizada.
Delicia de gobernantes: Somos pobres y nos venden.