TNo perder cuando el equipo juega fuera de su campo siempre se consideró un buen resultado, salvo en la Copa u otras eliminatorias en las que entra el valor total de los goles, y aún ganando uno de los partidos puede no resultar suficiente para evitar el k.o. tan temido por los equipos y sus seguidores.
El empate (0-0) de Córdoba, además de sumar un punto, aumenta la esperanza de entrar en una senda mejor de la que se siguió hasta El Arcángel, en donde se esperaba una victoria que quizás se hubiera conseguido de no sufrir el hándicap de verse con un hombre menos durante una hora.
El empate se da por buen resultado, sin entrar en un análisis que ofrecería discrepancias con lo dicho por Víctor Fernández, quien calificó de ?extraordinario? el trabajo del equipo. Efectivamente, el Deportivo cerró bien su área impidiendo al Córdoba maniobrar en zona de peligro para Fabricio, pero calificar la actuación del conjunto como extraordinaria parece exagerado, pues no pasó de ser un trabajo intensivo al jugar diez contra once, reconociendo al Córdoba unas grandes deficiencias técnicas, tanto que en El Arcángel se escucharon pitos dedicados al equipo local.
Volviendo al comienzo de este comentario, recalcamos la importancia de no perder fuera de casa. Además de puntuar, se tranquiliza durante algún tiempo al seguidor, porque la jornada 11 se atrasa y el Deportivo no volverá a verse en Riazor hasta dentro de dos semanas frente a la Real Sociedad. En tanto, parece aconsejable no dejarse llevar por el optimismo.