Si París bien valía una misa, qué no valdrá la Moncloa. Pedro Sánchez ha aprovechado los turrones para intentar camuflar un rosario de concesiones a los secesionistas que garantice su investidura en precario y le
Si París bien valía una misa, qué no valdrá la Moncloa. Pedro Sánchez ha aprovechado los turrones para intentar camuflar un rosario de concesiones a los secesionistas que garantice su investidura en precario y le