«El Día de Muertos y Halloween son festividades culturales totalmente diferentes»
OPINIÓN
El Día de los Muertos no es Halloween
El Día de Muertos y Halloween son festividades culturales totalmente diferentes, con significados y orígenes distintos, aunque se celebren en fechas similares. Sus diferencias parten desde sus orígenes, ya que el Día de Muertos es una tradición prehispánica que rendía culto a la muerte. Se celebra principalmente en México, Centroamérica y Sudamérica, donde se recuerda a los familiares o difuntos que ya no están entre nosotros a través de altares de muertos, visitas al cementerio, comida y bebidas que más disfrutaban en vida, música muy acorde a la temporada —como La llorona— y películas infantiles relacionadas con este día. Los altares de muerto, además de tener forma de pirámide, deben contener: la fotografía de un familiar querido, el típico pan da muerto con chocolate, papel picado con figuras de colores, flor de cempasúchil para adornarlo, frutas cítricas de temporada, los famosos alebrijes o almas en forma de animales con alas, tequila o mezcal, gastronomía tradicional, velas, muñecos de catrinas o en dibujos, y calaveras de azúcar.
En el caso de Halloween, se considera una celebración pagana que marcaba el fin de la temporada de cosecha y el inicio del invierno. Tiene sus raíces en el antiguo festival celta conocido como el samhain, que significa fin del verano, y es muy tradicional en países del norte como Estados Unidos, Canadá e Irlanda. Esta tradición surgió con el fin de espantar a los malos espíritus del mundo de los vivos: es por ello que brujas, fantasmas, muertos, hombres lobo o zombis son tradicionales de esta celebración; junto a las calabazas y la costumbre de los niños de disfrazarse y recorrer el barrio para que sus vecinos les regalen dulces y bombones.
El Día de Muertos se celebra desde el 28 de octubre hasta el 2 de noviembre, mientras que Halloween es el 31 de octubre. Lucero Dámaso López (presidenta de la asociación de mexicanos en Galicia Chichénitza).
Tenemos derechos
Tenemos derecho a morir como queramos sin ser juzgados ni bien, ni mal. No creo en las teorías religiosas que se basan en mantener el sufrimiento de las personas. Si podemos morir con un poco de dignidad, es mejor que estar arrastrando más dolor del necesario a los que te quieren. ¿Por qué algunos se niegan a practicar la eutanasia? Aquí no hay códigos morales. No mezclemos la religión con otras cosas, porque no casa con ninguna. Andrés Nidáguila. Pontedeume.