El titular de La Voz (23-11) dice: «La Xunta visita Dinamarca para explorar alternativas de rehabilitación residencial». Da cuenta del viaje de personal de la Consellería de Medio Ambiente a Copenhague, en el que visitaron los jardines de Oersted. Me ha alegrado saber que los daneses honran al científico más significativo de Dinamarca, Hans Christian Oersted, poniéndole su nombre a unos jardines y que ese nombre se conserve.
Oersted se hizo famoso por sentar uno de los pilares del electromagnetismo. En 1820 realizó una experiencia en la cual se puso de manifiesto que la corriente eléctrica desvía una aguja magnética situada en sus proximidades. Eso quiere decir que las corrientes eléctricas se comportan como imanes y pueden interactuar con otros imanes. El experimento de Oersted es la base de funcionamiento de los motores eléctricos que transforman la energía eléctrica en movimiento.
El otro pilar del electromagnetismo está en la experiencia de Faraday, que demuestra que las variaciones de un campo magnético engendran corriente eléctrica. Es la base de funcionamiento de la mayoría de los generadores de electricidad (hidráulica, térmica, eólica). Oersted consideraba que el conocimiento, y especialmente la formación científica, eran necesarios para elevar el nivel cultural de los pueblos. En ese sentido, fundó y dirigió la Sociedad para la Divulgación de las Ciencias.