Grupo Wagner. Conforma un brutal ejército privado integrado por mercenarios rusos. Según las últimas informaciones, estos asesinos han sido contratados para, entre otras cosas, acabar con la vida del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski (44 años); con la de su familia (su mujer, Olena Zelenska, y sus dos hijos Aleksandra, de 17, y Kiril, de 9 años), y con la de otras 23 personas.
Para hacer este trabajo y tomar el país, dicen fuentes citadas por The Times, entraron en Ucrania en enero pasado entre 2.000 y 4.000 paramilitares, a los que se sumaron otros 400 que acaban de llegar a Kiev. El oficio de estos mercenarios, presentes en más de 30 países, es el de matar. Pero no matan de manera limpia, rápida y sin estridencias. No. Matan aterrorizando a su «presa», a la que pueden interrogar durante horas para después degollarla sin escrúpulos. ¿Cuánto cobran por su trabajo? No hay datos fidedignos, pero se sabe que las cantidades varían en función de la peligrosidad de la misión. En Ucrania pagan la mitad que en Irak. ¿Pero cuánto? No ha trascendido, pero quizá unos 6.000 al mes más pagos en especie (oro y otros metales) en ciertos países.