Con permiso del señor Will Smith, he aquí al hombre del día, Iván Espinosa de los Monteros, de actualidad por no haber pagado la deuda de unas obras en su chalé. No sabía a quién abonársela y, es comprensible, no quería que el dinero cayese en saco roto, explicó tan digno él. Sí, ya es casualidad que esto de no saber a quién hay que pagar lo que se debe solo le pasa en este país a personas que se dedican a la cosa pública. El caso es que de un día para otro, justo tras el anuncio del embargo de su sueldo por parte de un juzgado, Espinosa de los Monteros va y cancela la minuta, que era de algo más de 63.000 euros. O sea, que dinero, o un amigo que le preste dinero, no le falta al diputado, al que, como se ve en la imagen, tampoco le falta reloj. Que este llevase varios años con la pila muerta es otro tema. El artefacto ocupa un rato largo de su muñeca. Se ve poderoso. Seguro que está pagado y bien pagado. Faltaría Vox.