«Planchabragas» y «blandengues» del 8M

César Rodríguez Pérez
César Rodríguez JUEGO DE TRONOS

OPINIÓN

El cantante el Fary en las fiestas de San Bartolomeu de Noia del año 2003
El cantante el Fary en las fiestas de San Bartolomeu de Noia del año 2003 Simón Balvís

10 mar 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

En la resaca del 8M, un término supuestamente despectivo, «planchabragas», se convirtió en tendencia en redes sociales.

Lo acuñaron los cavernícolas que rechazan cualquier avance en igualdad, espantados de que las movilizaciones del día de la mujer volvieran a ser un éxito, pese a las polémicas (Ángela Rodríguez siempre está, por méritos propios, en el ojo del huracán) y el cisma que divide al feminismo.

Actuaron como amplificadores varios batallones de bots (Elon Musk, ¿no ibas a eliminarlos de Twitter?) y un montón de valientes con seudónimo que se acordaron del Fary. Aquel cantante, arquetipo de macho ibérico y profeta, que alertaba ya en 1984 del peligro de que los hombres hicieran la compra, llevaran el carrito del bebé y se volvieran «blandengues».

Casi 40 años después, algunos siguen en las mismas, reivindicando valores de cuando sotanas y censores tenían mando en plaza sobre vidas y conciencias. De los tiempos del Consultorio de Elena Francis, aquel programa de radio que ayudó a proteger la moral franquista adoctrinando a las mujeres para proteger la sacrosanta institución familiar por encima de todas las cosas, aunque hubiera abusos y maltratos.

La ficticia Elena Francis fue la primera influencer, según el formidable documental que emitió la 2 el 8M, pero era más falsa que Judas. Una voz dulce y una simple marioneta que incluso tuvo a un hombre detrás dictando respuestas convenientes a sus «queridas amigas».