Generación Z

Luis Ferrer i Balsebre
luis ferrer i balsebre EL TONEL DE DIÓGENES

OPINIÓN

MONICA IRAGO

15 jul 2023 . Actualizado a las 22:33 h.

Generación Z es el nombre que se da a los nacidos después de 1995 y antes del 2010. Sus características son ser nativos digitales, usar la tecnología y las redes sociales desde edad muy temprana y haber vivido siempre con internet. 

Los hombres y mujeres de esa generación son los primeros colonos del entorno virtual, su tiempo es el tecnológico y su vida transcurre en una pantalla, bien sea mirándola, bien exhibiéndose en ella. Están perfectamente adaptados a la vida digital, donde estudian, trabajan, se divierten, se enrollan, compran, hacen gestiones administrativas y todo lo que las generaciones anteriores hacíamos en papel, en una ventanilla o en un Simca 1.000.

Sin embargo, son un enigma, porque representan el punto de inflexión histórica en la humanidad que supone pasar del hombre que trabajaba o estudiaba al que hará otra cosa que todavía no sabemos muy bien qué, ni cómo será. Aunque algo ya conocemos. La encuesta sobre el ocio digital en los adolescentes de la Fundación La Caixa arrojó que la práctica totalidad siguen a creadores de contenidos online. Actualmente, en España hay más de 63.000 con más de 10.000 seguidores; más de 12.000 con más de 100.000, que ya son considerados profesionales; y 1.100 que tienen más de un millón de seguidores, y que son conocidos como macroinfluencers.

Sus ingresos dependen de las visualizaciones que consigan, los anuncios y contratos con marcas. Todo lo fían a su imagen y talento natural. Las niñas y los niños ya no quieren ser princesas ni futbolistas, quieren ser yutuberos o campeones en Instagram. Un éxito que se consigue lejos de los cánones del esfuerzo y el trabajo duro que, hasta la fecha, conformaban el manual de batalla para las generaciones anteriores. Aquellas condiciones ya no son garantía de éxito y lo han comprobado en sus padres y abuelos. ¿Cómo rescatarlos de esta enajenación tan rentable y aparentemente cómoda?

Los Z son gente ambiciosa y perezosa a la vez, hiperconectada con el mundo, pero obsesionada consigo misma (selfis), cuyo interés está en la audiencia más que en los demás. Su gente está en el móvil, su interés también. El aumento progresivo de malestar psíquico que observamos tiene mucho que ver con la falta de competencias físicas y de la funcionalidad de un trabajo en sentido original: trabajo es el conjunto de actividades que son realizadas con el objetivo de alcanzar una meta, solucionar un problema o producir bienes y servicios para atender las necesidades humanas.

La meta son más seguidores, el problema es su imagen y la mayoría nunca han sufrido grandes necesidades. Aburridos de vivir bien, se angustian como Narciso mirando su reflejo en la pantalla.