
Descontada la auténtica catástrofe de lo que los nacionalistas gallegos califican con desdén como «a esquerda estatal» (PSdeG, Podemos y Sumar), la noche electoral asistimos a un espectáculo verdaderamente insólito: el de algunos canales privados
Descontada la auténtica catástrofe de lo que los nacionalistas gallegos califican con desdén como «a esquerda estatal» (PSdeG, Podemos y Sumar), la noche electoral asistimos a un espectáculo verdaderamente insólito: el de algunos canales privados