La Eurocopa 2024 se celebrará en Alemania entre el 14 de junio y el 14 de julio de este año. El balón de estas grandes competiciones de fútbol, normalmente, presenta novedades. En esta ocasión, presenta una nueva estructura de 20 paneles que mejora la aerodinámica de balones anteriores, aumentando la precisión en los desplazamientos y la estabilidad de su vuelo. Está fabricado con materiales químicos respetuosos con el ambiente como poliéster reciclado y tinta a base de agua, que se disuelve fácilmente en el agua del riego del césped. En su desarrollo se han empleado materiales biológicos como fibra de maíz, caña de azúcar o pulpa de madera que pueden ser degradados por los microorganismos del suelo, impidiendo su acumulación en el césped.
En la señalización de fuera de juego se cometen muchos errores. En el mundial del 2002, del total de fueras de juego señalados, el 26,6 % no lo eran y se dejaron de pitar el 26,1 % de los que sí lo eran. Para reconducir esta situación, el balón del 2024 lleva un sensor en su punto medio. Cuando el jugador golpea el balón, el sensor registra el momento exacto y se conecta a un sistema óptico formado por 12 cámaras. La información es procesada por un sistema de IA con animaciones en 3D e informa a los árbitros de aquellos jugadores que se encuentra en fuera de juego.