Los jóvenes no queremos trabajar, ¿o no podemos?
Como joven estudiante y trabajadora quiero señalar que nuestra aparente renuencia a trabajar no se debe a la falta de voluntad, sino a obstáculos reales en el ámbito laboral. Muchos empleadores exigen experiencia previa para prácticas o posiciones iniciales. Esta situación nos coloca en un círculo vicioso: ¿cómo podemos obtener experiencia si no se nos da la oportunidad de adquirirla? Además, la incompatibilidad de horarios con nuestras actividades educativas dificulta aún más nuestra participación en el mercado laboral. A esto se suma la precariedad laboral, con empleos que ofrecen condiciones y salarios insuficientes, así como una falta de seguridad laboral. Esta situación no solo afecta a nuestra calidad de vida presente, sino que también compromete nuestro futuro, como la dificultad para emanciparnos hasta edades avanzadas. Los jóvenes estamos dispuestos a trabajar y contribuir al crecimiento de la sociedad, pero necesitamos oportunidades reales. De lo contrario, muchos optarán por buscarlas fuera de nuestro país. Nerea Borrego. Barcelona
Estresados
Si su corbata ha mutado en garrapata, el cinturón en boa constrictor y los botones de la camisa en arañas bananeras. Si su corazón, chuchú, va cual pistón de locomotora de ferrocarril, sus ojos se han tornado agujeros negros, y su pulso, un sismógrafo que delata un movimiento telúrico fuerza 8 en su escala vital. Y si sus noches son más negras que la negra sombra, su carácter trinitrotolueno y su otrora legendaria alegría está en busca y captura. No lo dude: el estrés, cual chapapote, se extiende inexorable de norte a sur por toda su geografía corpórea. ¡Inspire! ¡Espire! Podría expirar. F. Javier Santos. Santiago.
Solo un punto de partida
La tramitación de la ley de la amnistía se vive en el PSOE como una garantía. No así en las filas de Junts. Puigdemont espera la impunidad, y el PSOE, la estabilidad. Pero como le ha recordado Turull a Pedro Sánchez, nada está asegurado. Los presupuestos generales del Estado no han sido presentados ni votados y la estabilidad política depende de lo que día a día se vaya alcanzando en la negociación entre ambas fuerzas. El horizonte, apunta Junts, es la autodeterminación. En la hoja de ruta del independentismo, apostilla ERC, este solo es un punto de partida. Pedro García. Gerona