
Las elecciones vascas, ahora ya a cara de perro dada la posibilidad de que los herederos de ETA se conviertan en la fuerza más votada el próximo domingo, han dejado finalmente al descubierto las vergüenzas
Las elecciones vascas, ahora ya a cara de perro dada la posibilidad de que los herederos de ETA se conviertan en la fuerza más votada el próximo domingo, han dejado finalmente al descubierto las vergüenzas