Basterra y Netflix

Ignacio Bermúdez de Castro
Ignacio Bermúdez de Castro PASOS SIN HUELLAS

OPINIÓN

Álvaro Ballesteros

13 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Alfonso Basterra, padre de la pequeña Asunta, lleva 11 años ingresado en la cárcel de Teixeiro.

La pena que le fue impuesta por haber acabado con la vida de su hija, junto a su esposa Rosario Porto, no solamente han sido 18 años de prisión, sino tener que convivir con su propia conciencia y tener a su plena disposición las veinticuatro horas del día y de la noche para no dejar de pensar en la atrocidad cometida más de una década atrás. Parece ser que aguanta estoicamente su cautiverio, pero la procesión necesariamente tiene que ir por dentro. No puede ser de otra manera.

Alfonso Basterra está demostrando ser más fuerte que su exesposa.

Pasa sus días entre rejas como encargado de la biblioteca sin querer ni oír hablar de la serie de Netflix El caso Asunta.

Dice haber perdonado al juez instructor, al fiscal, a la acusación particular y a los medios de comunicación sin reparar que a estos nada tiene que perdonar. Se limitaron a hacer su trabajo y lograron encarcelar a una persona tóxica y narcisista.

¿Es el ser humano el lobo de Hobbes o el buen salvaje de Rousseau?

Para Hobbes el hombre es intrínsecamente malo y violento y necesita del Estado para domeñar sus instintos.

Por el contrario Rousseau piensa que nuestra especie es bondadosa y pacífica de forma natural y es la sociedad la que le corrompe.

Querría pensar como el ginebrino, pero casos como este me hacen coincidir con Hobbes. «El hombre es un lobo para el hombre».

No me extraña que Basterra no quiera ver la serie de Netflix. Si fuera así, estoy totalmente seguro que su tortura —la que lo confiese o no ya está sufriendo— se multiplicaría por infinitas veces.