Algo no anda bien si al cabo de cinco días de haber pasado la borrasca Kirk se mantienen los árboles caídos en uno de los pocos (y abandonados a su suerte) paseos naturales que tiene Vigo. Las sendas peatonales se ven amenazas con árboles o ramas que han caído con los fuertes vientos que sacudieron la ciudad entre el martes y miércoles de la pasada semana. En algunos casos, incluso se impide el paso de peatones o ciclistas. Está claro que a algunos solo les preocupa la vuelta, indeseada para muchos, de la manoseada Navidad. Jose L. Mariño. Vigo.
Urge cobijar a la población
La generación anterior luchó también por la vivienda, pero centrándose en combatir el precio de los pisos y sus hipotecas. Ahora lo hace por una necesidad aún más urgente y vital: el no quedarse en la calle; el poder, al menos, alquilar pisos o habitaciones. De ahí que estas primeras manifestaciones sean mucho mayores que entonces, al ser sus necesidades más perentorias. Si las autoridades y los propietarios no reaccionan pronto con medidas adecuadas, la crisis social puede ser mucho peor que entonces. Martín Sagrera. Madrid.