
El rotundo rechazo por parte del nacionalismo gallego radical de muchos de los cambios que hemos vivido en Galicia en el último medio siglo (del Estatuto a la autopista, sin ir más lejos) no es
El rotundo rechazo por parte del nacionalismo gallego radical de muchos de los cambios que hemos vivido en Galicia en el último medio siglo (del Estatuto a la autopista, sin ir más lejos) no es