Después de décadas de reivindicaciones, el 2006 fue el primer año en el que el Gobierno central incluía en sus presupuestos una partida para desarrollar el proyecto de una autovía entre Ponferrada y Ourense. A finales de ese año el Ministerio de Fomento daba a conocer un primer estudio con cuatro posibles corredores: el hoy escogido, otro por Ponferrada-O Barco por la N-536, otro por A Rúa-Ourense por la antigua N-120 (la preferida desde las comarcas de Trives y Caldelas) y un cuarto por Pantón-Ourense a través de un nuevo vial que saldría de la N-120 a la altura de O Castro de Ferreira (Lugo). Comenzaron entonces las alegaciones de los posibles afectados (y beneficiados) en lo que se confirmaron como dos bandos contrarios que tenían Valdeorras como punto de bifurcación: hacia Trives o hacia Monforte.
Desde entonces se ha especulado mucho, y las noticias ofrecidas por las diferentes Administraciones apuntaban a que la opción escogida iba a ser Monforte. Primero por boca del secretario de organización del PSOE, José Blanco, que aseguró que pasaría por la localidad lucense; después con el estudio sobre la implantación de plataformas logísticas en Galicia presentado por la Consellería de Política Territorial en diciembre pasado (que contemplaba el paso de la autovía por Monforte), y hace apenas unos meses (en abril) con la convocatoria (por parte de la Xunta) de un estudio para la creación de una nueva carretera entre Trives y la N-120.
Ayer se confirmó lo ya sabido. La A-76 entrará en Galicia por Valdeorras y seguirá hacia Ourense por Monforte. En sus más de 125 kilómetros de recorrido tendrá dos carriles en cada sentido de la circulación.