La feria del disco y el cedé reunió a cientos de visitantes en su regreso a Ourense tras tres años
OURENSE
Una ventana al pasado en diferentes formatos. Discos que forman parte de la historia de cada uno y a la vez de la sociedad en la que vivimos. Ver a un imberbe Miguel Bosé en la portada de un vinilo, tamaño single, editado en Japón en el año 1981 es una de esas rarezas que seguro no pasó desapercibida para cualquiera de los varios cientos de visitantes que ayer visitaron la Feria del disco y el cedé.
Un moviola musical en la que Miguel Ríos o Rosendo vuelven a ocupar los lugares privilegiados del expositor dentro del mercado ibérico, acompañando a Extremoduro o Derribos Arias. Y en donde los extintos Enemigos, todavía se mantienen con vida bajo el título Tras el último no va nadie. Clásicos de la música hoy ya reconvertidos en iconos del cine, la música o simplemente de la cultura del siglo pasado. Este es el caso de Sammy Davis Jr, que acompañan a otros más recientes como Bruce Sprinting, Bob Marley, Elvis Presley o David Bowie.
Manuel Otero, organizador de la feria, calificaba ayer, minutos antes de terminar la jornada como un «éxito ya que hacía tres años que no veníamos a Ourense, dado que la última vez apenas llegamos a las 50 personas, algo que no nos dio apenas ni para pagar el alquiler del salón».
Manuel , además, confirma el repunte en la venta de vinilo en comparación con la venta del formato cedé, añadiendo «que nunca se ha dejado de vender, algo de lo que puedo dar fe ya que llevo toda la vida viviendo de los vinilos y siempre se han vendido».