El local ribadaviense recibió el reconocimiento gastronómico en la categoría de parrillada asador
14 ene 2010 . Actualizado a las 02:00 h.En la N-120 a la entrada de Ribadavia, se encuentra el restaurante A Quinza, que recibió el pasado año el reconocimiento del Tenedor de Oro en su última edición, símbolo de calidad y prestigio. Rafael Gómez Domínguez, uno de su propietarios, junto a Jorge Manuel, reconoce la repercusión que este galardón está teniendo en el establecimiento.
-¿Qué supone para ustedes recibir ese reconocimiento para el restaurante A Quinza?
-El Tenedor de Oro nos obliga a perfeccionarnos más y ser aún más exigentes con nosotros mismos para dar más calidad y mejor servicio hacia el cliente, porque demuestra que la gente depositó en nosotros una confianza y tenemos que responder a ella y al reconocimiento recibido.
-¿Se nota en la clientela la distinción?
-Sí, porque la guía gastronómica del Tenedor de Oro es una referencia que se sigue mucho y hay personas que han venido a conocernos después de saber que nos lo habían dado.
-¿Qué tipo de comida y qué especialidades ofrece?
-Somos especialistas en comidas al grill, que es en la categoría que ganamos, la de parrillada asador, y destacamos sobre todo, en carnes, aunque también ofrecemos pescados y mariscos de gran calidad, respetando las recetas más tradicionales.
-¿Organizan también banquetes para grupos?
-Sí, en el restaurante tenemos espacio para dar de comer a 170 comensales y preparamos además reuniones de amigos, cumpleaños, bautizos, bodas, comuniones y lo que usted desee, además de un servicio completo de restaurante con café bar incluido y también aparcamiento.
-Desde su apertura en el año 1994 ¿han superado las expectativas que tenían cuando abrieron?
-Empezamos vendiendo pollos asados como un Coren grill, en un local pequeño, pero cada vez teníamos más gente y más demanda y fuimos ampliando. Hoy en día damos doscientas comidas diarias. A ello hay que añadir además la venta de comida preparada para llevar, de lo que se te pueda ocurrir. Es un servicio que prestamos para casas de turismo rural, a nivel particular o para grupos que se reúnen en una bodega o en otros sitios.
-¿Qué tipo de clientela tienen habitualmente?
-De todo tipo, desde obreros hasta banquetes de bodas, bautizos, comuniones o de trabajo. Recibimos desde trabajadores hasta la clase más alta porque ofrecemos precios para todos los gustos.
-Y todo acompañado de vinos de prestigio, respaldados con premios.
-Sí, son de la bodega Castrorei. Ofrecemos Divino Rei que ganó el primer premio en la categoría de blancos de bodegas en la Feira do Viño de 2008 y repitió el año pasado en la cata popular.