Joaquín Balsa, original y abstracto

jerónimo martel OURENSE

OURENSE

El artista expone su colección «Silver» en el Simeón

05 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

En el Centro Cultural de la Diputación -sala 1, de la planta baja- y hasta el próximo día 30 de septiembre, expone Joaquín Balsa (Ourense, 1961, con domicilio en Ourense), bajo el título «Colección Silver». Este título corresponde al color de fondo plateado brillante de sus cuadros y esculturas actuales, dado su soporte de acero galvanizado -esto es, recubierto metálicamente-, en concreto de zinc. Por cierto, que ese galvanizado, además de resultar de fácil pintura, confiere a sus obras una protección integral y una resistencia mecánica elevada. Como soporte de la pintura artística, esta solución técnica brindada por el acero galvanizado es un verdadero descubrimiento. Y otorga a la pintura una referencia industrial deliberada, que realza en la presente muestra la presencia iconográfica de un despampanante Rolls Royce Silver Cloud de 1955. En el catálogo de la exposición se dice agudamente: «O artista insiste no uso de elementos industriais como soporte pictórico». Una de las pinturas de la muestra se titula simbólicamente «Processo industrial» (2003 -cuero, pintura y técnica mixta sobre papel- 200 x 200 cm).

En fin, el símbolo del automóvil tampoco deja de ser ilustrativo aquí y ahora. Como es sabido, lo utilizó el fundador del modernismo -el poeta, pintor y polemista italiano Filippo Tommaso Marinetti (1876-1944)- en un famoso artículo del periódico Le Figaro de París, donde dijo: «Destruyamos los museos, los cementerios, una obra de arte debe ser agresiva ? Un automóvil rugiente es más hermoso que la Victoria de Samotracia». Un texto del catálogo de la exposición, de Isabel Bugallo, llega a afirmar: «Esta exposición de Balsa nos transporta de lo conceptual al arte industrial». Y a su vez, también en dicho catálogo, la comisaria de la muestra, Ángeles Rodríguez Valiño, refiriéndose a la colección Silver de Balsa, afirma que «supone un escalón en la evolución de su pintura». Otro texto del catálogo de la exposición, titulado «Joaquín Balsa calígrafo del acero» y firmado por Manuel Márquez Crespo, Historiador del Arte y galerista, añade por su parte: «nuestro Joaquín Balsa eligió el acero galvanizado como marca de agua en sus creaciones»; y habla además al respecto de «una dignificación del diseño industrial». Pero, sobre todo, Manuel Márquez entra con gran tino y acierto a clasificar el arte de Balsa, tarea no fácil dada su básica y rotunda originalidad. Le atribuye exactamente «expresionismo abstracto, tal vez tachismo, siempre condimentados por ramalazos que remiten a las vidrieras góticas o al opus teselatum romano».

Exposiciones

Las exposiciones individuales de Balsa son muy contadas y se celebraron en los lugares siguientes: A Fábrica de Allariz (1993); el Museo Municipal de Ourense, el Museo Municipal Santos Rocha de Figueira da Foz en Portugal, el Liceo de Betanzos, la Casa do Curro de Moncao en Portugal y la Gira de la Xunta de Galicia «Os nosos artistas» (2002); la Casa de Cultura de Vila de Cruces en Pontevedra (2003); la Galería MAC de Pontevedra, el Club Financiero de A Coruña y la Casa de Galicia en Madrid (2004); el Club Financiero de Vigo y la Galería Tanjart de Tánger en Marruecos (2005); la Galería Jamete de Cuenca y la Galería Dorian de Lisboa (2006); y, finalmente, la Fundación Aina María Lliterax de Can Cardaix en Artá de Mallorca y el Museo de Cáceres (2009). En cambio, es larga, brillante y muy internacional la lista de exposiciones colectivas del artista. En ese sentido, Manuel Márquez habla de la «potente ambición internacional» de Balsa, que de hecho es ya miembro del «Movimiento Artístico Internacional» (MAI) de reciente creación en Méjico. Sus exposiciones colectivas han tenido lugar en hasta trece otros países: Alemania, Austria, Estados Unidos, Francia, Holanda, Inglaterra, Italia, Marruecos, Mónaco, Noruega, Portugal, Suiza y Turquía.