Un permiso del Obispado incrementa los espacios abiertos en Os Remedios
13 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La experiencia es un grado para todo y también para los organizadores de la Carreira Popular de San Martiño, que año a año van limando pequeños detalles. Y es que más vale prevenir que curar cuando se habla de cifras como los más de 11.700 inscritos, que no son fáciles de organizar en el día de la competición.
Así lo recuerda Cándido Gómez, uno de los responsables de los promotores de la prueba: «Al final, somos los funcionarios del Consello Municipal de Deportes los que nos hacemos cargo de un trabajo que cada vez se hace más complicado, a medida que la dimensión de la carrera va creciendo». Así, desde que se cierra al tráfico el recorrido, a las 7.00 horas, los integrantes de la organización dispondrán de unas dos horas y media para colocar vallas, arcos de meta, puntos kilométricos y otros componentes de una estructura que es necesaria. La ayuda de los voluntarios cobra también una notoria relevancia, que en todo caso tiene cómo vértice principal el objetivo de alcanzar el máximo nivel de seguridad para los protagonistas de la carrera y también para el público que se acerque al trazado.
Entre las novedades de este año en ese capítulo, destaca la opción de evacuar a los atletas que crucen la meta por la zona de la capilla de Os Remedios, evitando así el riesgo que se ha podido detectar en los últimos años al utilizar el túnel de la piscina, un pasillo de cincuenta metros por dos de ancho, que un momento dado podría convertirse en un embudo. Tras solicitar un permiso al Obispado, se accederá por el entorno de la citada edificación religiosa a dos áreas más abiertas. Del mismo modo, se ubicará en ese entorno el punto de encuentro con megafonía, para acelerar la localización de cualquier niño que se aleje de padres o acompañantes.
Gómez incidía en todo caso en que «es importante que quienes acompañen a los más pequeños fijen también sus propios puntos de referencia, para evitar sustos». El panorama de la zona de meta también variará considerablemente con la instalación de gradas para facilitar el orden entre las personas que se acerquen a contemplar la llegada. Otra de las medidas tendentes a minimizar cualquier tipo de problemas en el punto álgido de la matinal.
El local Alejandro Fernández retiró su solicitud para tomar parte en la carrera
El órgano rector del Consello Municipal de Deportes se enfrentaba a primeras horas de la tarde de ayer con el reto de valorar la solicitud que había presentado el atleta local Alejandro Fernández, con la intención de participar el próximo domingo en la Popular de San Martiño, pese a que no había efectuado su inscripción en el plazo establecido.
La situación había provocado cierta polémica en las redes sociales, ante la posibilidad de que el actual Campeón de España de los 10.000 metros, distancia de la prueba absoluta en la clásica ourensana, pudiera ser admitido pese a que había incumplido el reglamento de la carrera. Pero antes de que se tomara en consideración su petición, el propio corredor del 3&Run Pedro Nimo optó por retirarla.
De esa decisión dio cuenta también en los mismos foros en los que había sido criticada su intención de participar en la prueba de casa: «Como saben muchos aficionados al atletismo, ya es bastante duro correr diez kilómetros con una periostitis, a un ritmo de tres minutos el kilómetro, para hacerlo además contra la opinión de tanta gente».
Fernández Rivera mostró además una evidente decepción por algunas de las opiniones que había leído en las redes sociales y de hecho reconocía que le provocaban «honda tristeza» los posicionamientos de algunos corredores en cuanto a la posibilidad de que tomara parte en la inminente edición de la multitudinaria convocatoria ourensana.
También explicó el bicampeón de la carrera (2012 y 2013), que pretendía desmarcarse de la problemática que había suscitado: «No deseo colocar a los miembros del Consello Municipal de Deportes en una delicada disyuntiva, ni dar la posibilidad de que alguien use la hipotética autorización a participar en la carrera como justificante de protestas o recursos por ilegalidad. Definitivamente y con enorme pesar, tampoco correré la San Martiño este año», en clara referencia a que en la edición anterior no pudo hacerlo debido a una inoportuna lesión en el talón de Aquiles.
Mario Guede, edil de Deportes y uno de los integrantes del consejo recto que debía dirimir la solicitud de Alejandro, matizó al respecto: «Es una pena que uno de los atletas más representativos de la provincia se quede fuera de la carrera, pero hay que tener en cuenta que esta no es una organización privada y que está sujeta a una reglamentación. Él mismo retiró su escrito, a la vista de la repercusión que causó lo sucedido, sobre todo en las redes sociales, pero es un deportista del que todos los ourensanos nos sentimos orgullosos».
La nueva lesión y un despiste con los plazos de inscripción dieron lugar a un despiste que a la postre apea a Alejandro.
«Ya es duro correr diez kilómetros con una periostitis, para hacerlo en contra de la opinión de tanta gente»
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