«Ni una víctima de tráfico más; son las más inútiles»

mar gil OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Santi M. Amil

Afectados por accidentes piden apoyo y concienciación social

14 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

«Yo vengo hoy aquí para dar un testimonio desgarrador de mi vida». Fueron las primeras palabras de Fátima Balsa en el acto celebrado ayer en el Centro Cultural Marcos Valcárcel para conmemorar el Día mundial de las víctimas de la violencia vial. Y Fátima cumplió.

Su voz es la de una víctima de la carretera. Como la de Lara López, que la precedió en el turno de la palabra para explicar cómo un 25 de marzo cambió su vida. Fátima y Lara pusieron su experiencia personal al servicio de un auditorio integrado por autoridades, representantes de colectivos sociales y, sobre todo, escolares. Un grupo numeroso, de Salesianos y Otero Pedrayo, puso la nota alegre en un acto de luto, pero también de lucha.

Lara, de 38 años y madre de dos niñas, narró el accidente que se llevó la vida de su suegra y la sumergió a ella en un calvario de médicos que la marca todavía. «¿En que cambiou a miña vida? -se preguntó ayer-. En todo. Aprendín que tiña que ser feliz día a día».

Un conductor imprudente, recuerda, dio un vuelco a su historia: «Conducir non é un xogo, hai que ir con todos os sentidos e impedir que conduza xente que non está en condicións».

A su lado, Fátima Balsa arrancó las lágrimas del auditorio con la memoria de su hija Cristina, fallecida a los 14 años hace ya 16. Pero el dolor sigue impertérrito en su rostro: «Cristina ya no está porque un conductor temerario que no tiene en cuenta a nadie la ha sacado del medio. Mi vida ha cambiado completamente. Mi hijo Pablo, con 5 años, aún arrastra secuelas».

«Ni una víctima más; son las más inútiles, no solucionan nada», sentenció. Angélica Ferro, portavoz de Stop Accidentes y P(A)T, resumió el sentir de los presentes: «Grazas polo esforzo de convertir a vosa dor en loita».