A prisión un conductor pillado borracho al volante y con el carné retirado

La Voz OURENSE

OURENSE

MARCOS MÍGUEZ

La Guardia Civil lo interceptó al volante de un automóvil ebrio a las nueve y media de la mañana

29 jun 2019 . Actualizado a las 09:59 h.

Es la cuarta sentencia que se le impone por un delito contra la seguridad vial, motivado en todos los casos por circular bajo los efectos del alcohol, y ante el «nulo efecto disuasorio que han supuesto esas otras penas de menor gravedad», la jueza ve justificado optar por la medida de prisión. Así las cosas, el juzgado de lo penal 2 de Ourense ha impuesto la pena de cinco meses y 9 días de prisión para Francisco R. L., al considerarlo responsable de haber cometido un delito contra la seguridad vial por conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, en concurso ideal con otro de conducción careciendo de permiso.

Es la severa respuesta penal, las medidas de prisión no son habituales en los delitos de tráfico, para un conductor que acumula un expediente poco común. En el año 2006 fue condenado por el juzgado de instrucción de Xinzo de Limia, donde volvió a ser sentenciado en julio del 2018. La tercera condena, que implicaba la pérdida del permiso de conducir durante dos años, le llegó el 15 de enero de este mismo año, pero lejos de optar por apartarse de la carretera, o al menos dejar de beber antes de hacerlo, persistió. Y lo pillaron.

A las nueve de la mañana

Eran las nueve y media de la mañana del 26 de abril cuando agentes de la Guardia Civil le dieron el alto en la N-525, a la altura de Trasmiras. Ante las sospechas, por el aspecto que presentaba, de que pudiera encontrarse bajo los efectos del alcohol, los funcionarios del instituto armado le realizaron la prueba, en la que arrojó un resultado positivo, con una tasa de 0,86, bajando a 0,77 en la segunda prueba. Los agentes denunciaron al juzgado esta situación, añadiendo asimismo el hecho de que el acusado no podía conducir al tener el carné retirado por sentencia.

En el juicio por este asunto el acusado reconoció que antes de coger el coche, había bebido «vino, cerveza y algunos cubatas». También reconoció que conocía perfectamente que pesaba sobre él una orden judicial que le impedía conducir. En la sentencia, contra la que cabe presentar recurso, se establece ahora la pérdida de vigencia del permiso de conducir.