El gobierno local logra la ayuda de la Diputación y pide también la de la Xunta
17 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Los temporales Elsa y Fabien cerraron el año 2019 provocando graves daños en toda Galicia. En la capital ourensana la crecida del río Miño cubrió por completo los recursos termales públicos y la bajada de caudal ha dejado al descubierto todos los desperfectos ocasionados en esas infraestructuras. El gobierno municipal tiene ya una valoración inicial de daños y este jueves comenzaron los trabajos para repararlos.
La concejala de Turismo y Termalismo, Flora Moure, compareció ante los medios de comunicación y explicó que el coste será de 10.000 euros, aunque solo en lo que se refiere a los espacios termales. En A Chavasqueira se repondrá una ducha y se retirará, limpiará y secará la bomba. Además, se recolocará una barandilla y se instalará un nuevo panel informativo. En Outariz se realizarán los mismos trabajos con las bombas de agua y los alumnos el taller de empleo concedido por la Xunta al Concello de Ourense se encargarán de la retirada de los restos vegetales acumulados en la zona por los arrastres así como del arreglo de las zonas ajardinadas y de otras pequeñas reparaciones.
Quedan por valorar los daños que los temporales ocasionaron en las casetas de aseos y vestuarios y lo mismo ocurre con las termas del Muíño da Veiga, que aún están cubiertas por el agua. En su caso, una caseta fue desplazada de su base por la fuerza del río y el gobierno municipal no sabe si será posible repararla o si, por el contrario, será necesario sustituirla. Por otra parte, en todas las pozas se harán trabajos de desinfección de las instalaciones, de los que se ocupará la concesionaria del servicio de limpieza, Ecourense. A todo ello hay que añadir los daños en el Tinteiro, donde será necesaria la reparación o sustitución completa de la fuente y la recolocación del panel informativo.
El coste de estas actuaciones asciende, según explicó la concejala de Turismo y Termalismo, a 10.000 euros, pero en esa suma no se incluyen los arreglos necesarios en las instalaciones de alumbrado público, conexiones eléctricas, abastecimiento y saneamiento, caminos o vías públicas, zonas verdes y otras infraestructuras como aseos, zonas de juegos, barandillas y mobiliario urbano, que corresponden a otros departamentos municipales.
En este sentido, el concejal de Infraestructuras, Miguel Caride, explicó que en su área se prevén gastos de entre 5.000 y 6.000 para reposición de zahorra y de entre 5.000 y 8.000 para arreglos en el alumbrado público. Lo más costoso serían las dos torres de iluminación led que existían en la zona y que tienen un coste de 15.000 euros cada una. Caride explicó que en su día fueron instaladas por la Xunta en el marco del proyecto del Ecobarrio. Según dijo, ya está negociando con el gobierno gallego para que sea la Administración autonómica la que asuma su reposición.
Además, la Diputación ourensana aportará maquinaria y personal y, de hecho, los trabajos comenzaron este mismo jueves en el entorno de las termas públicas de Outariz. De este modo, con recursos propios y con la colaboración de otras instituciones, el Concello de Ourense evitará tener que recurrir a una contratación externa, algo que terminaría demorando el proceso, según indicó el concejal de Infraestructuras. «Ao final, dentro do que cabe, o maior custe é o custe social de ter pechadas esas instalacións durante un tempo», concluyó Caride.
Sigue sin fecha la reconstrucción de las instalaciones de pago quemadas en A Chavasqueira
Nueve meses después del incendio que calcinó por completo las termas de pago de A Chavasqueira, el gobierno municipal del Concello de Ourense sigue sin ser capaz de poner fecha a su reconstrucción y reapertura. La concejala de Turismo y Termalismo, Flora Moure, fue preguntada por este asunto durante su comparecencia ante los medios de comunicación para informar de la valoración de los daños que provocaron los temporales. Según dijo, el proyecto se está estudiando en Urbanismo. Además, la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil ha reclamado documentación relacionada con los permisos concedidos en su día para la instalación de A Chavasqueira. Moure dijo que confía en que esos trámites puedan resolverse «en próximas fechas» para así activar la rehabilitación de ese espacio.
Además, la concejala fue preguntada por los proyectos de futuro que el gobierno municipal tiene en materia de termalismo. «Lo primero es mejorar lo que ya tenemos», apuntó la edila, que señaló que el Concello sigue trabajando, en colaboración con la Xunta y la Diputación de Ourense, en la posibilidad de crear un gran hotel balneario. Se trata de una instalación «necesaria», según dijo, para aprovechar adecuadamente el potencial termal que existe en la ciudad.
Por otra parte, el concejal de Infraestructuras, Miguel Caride, explicó que en su departamento trabajan en el rediseño y mejora de los accesos a las termas públicas de las riberas del Miño. La conversión de la N-120 en un bulevar termal es una vieja reivindicación del Ayuntamiento.