El abuelo de Borja López, que lo crio desde pequeño, orgulloso del joven concejal
17 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Entre Antonio Trigás González y Borja López Trigás existe un vínculo emocional más fuerte que el habitual entre un abuelo y su nieto. El hoy concejal de la corporación municipal ourensana fue acogido por sus abuelos cuando tenía solo siete años y se crio con ellos hasta que fue mayor de edad. Antonio tuvo, por lo tanto, que ejercer también de padre y ambos hicieron de la necesidad virtud. Siguen muy unidos y comparten muchas cosas, como por ejemplo su militancia en el PSOE.
El abuelo explica que desde que era pequeño le atraían las ideas de la izquierda pese a que, en general, en su familia tiraban más hacia la derecha. «Eu fun sempre un pouco rebelde», cuenta entre risas Antonio, que a los 17 años emigró primero a Brasil y después a Venezuela. Volvió hace más de medio siglo y ya en España se afilió al PSOE. Décadas más tarde, su nieto siguió sus pasos, pero no fruto de una imposición, sino de forma natural, cuenta Borja: «Os valores nos que me educaron fixeron orientarme nese sentido».
Buenas referencias
Antonio no puede ocultar el orgullo que siente por ello. «Estou encantado de que estea no partido no que eu sempre crin», resume el hombre, que tampoco esconde que no le habría gustado que su nieto fuese, por ejemplo, del PP. «Pero tampouco llo ía prohibir», matiza rápidamente el abuelo, que destaca las buenas referencias que le llegan del modo en que Borja se desenvuelve en el Ayuntamiento: «Non atopei ninguén que me fale mal del no Concello. Xente de todos os partidos fálame ben del e iso é un orgullo».
Cree Antonio que se debe a que Borja, al contrario que otros muchos, «non se move por intereses particulares» y, además, a que trata con respeto al adversario político. Y eso que le han tocado tiempos difíciles en la política local. El joven concejal reconoce que el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, no se lo pone fácil y recuerda las burlas del regidor tras su primera intervención en el pleno, en el que estaba visiblemente nervioso por el estreno.
Dice que su relación personal con él no es mala, pero no le gusta su actitud en las sesiones plenarias. «Desde fóra pode incluso facerche graza, pero non sabes o que é iso ata que estás aí dentro metido. Son, ao mellor, seis horas aguantando faltas de respecto», lamenta el joven, que agradece la ayuda que recibió en su aterrizaje por parte del secretario, de la responsable de protocolo y del alguacil de alcaldía, recientemente jubilado. Borja asegura que, pese a la tensión en la que está habitualmente instalada la política local, trata de llevarse bien con todo el mundo
A su abuelo, que escucha atentamente todo lo que dice su nieto, tampoco le gusta Jácome. Hace hincapié en sus promesas incumplidas y destaca el papel del Partido Popular «porque eles foron quen o puxeron aí». Según asegura, «hai moitos cargos do PP, xente que incluso foron concelleiros, que non están para nada de acordo con todo isto». La situación actual de la política local es, a su juicio, «un desastre» y le ve difícil solución.
Antonio cree, en general, que la organizaciones no apuestan lo suficiente por los jóvenes. «Hai que darlle paso á xuventude, pero iso é algo que pasa en todos os partidos igual», lamenta. Y ahí está Borja, esperando.
Del apretón de manos a Zapatero al desencanto con la dirección actual en la provincia
El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero participó recientemente en un encuentro virtual con miembros de las Xuventudes Socialistas en la provincia y aprovechó para recordar una anécdota de una de sus visitas a Ourense. Antes de un mitin, en el año 2004, un simpatizante se le acercó y le dio tal apretón de manos que acabó dolorido. Se trataba de Antonio Trigás, que confiesa una gran admiración por Zapatero. «Foi o presidente máis social da historia», dice. Abuelo y nieto comparten también su apoyo a Pedro Sánchez. «Está aí porque o votamos os afiliados», dice Antonio, que echa en falta precisamente eso a nivel provincial: «Os afiliados so estamos para pagar e non temos nin voz nin voto». Tal es su malestar con la dirección del partido en Ourense que no quiso asistir a los mítines de la campaña de las autonómicas. Sí fue a una mesa el día de las elecciones. «Pero porque levo ao PSOE no corazón», matiza. Borja escucha a su abuelo, pero en este caso prefiere no participar en la conversación. Es concejal.
DNI
¿QUIÉNES SON?
Abuelo y nieto. Antonio Trigás González, nacido en 1933, se encargó de criar a su nieto, Borja López Trigas, que tiene 29 años.
¿QUÉ COMPARTEN?
Militantes del PSOE. El abuelo lleva décadas vinculado al partido socialista y Borja se afilió en cuanto pudo. Hoy en día es el concejal más joven de la corporación municipal.