Aquí en esta España bastante sadomasoquista siempre se anda con la filosofía del entrenador de fútbol Louis van Gaal, siempre negatifo, nunca positivo y nos comparamos con otros lugares más allá de los Pirineos y de los Alpes. Pues resulta que en Alemania el gobierno y el Parlamento van a discutir que, ante las arcas diezmadas, hay que buscar nuevos colectivos para cotizar obligatoriamente a la Seguridad Social para el cobro de pensión de jubilación. Piensan en llamar a pasar por caja a los funcionarios. ¿A los funcionarios alemanes no les descuentan en la nómina la cuota a la seguridad social para cobrar la pensión en el futuro? No. ¿Y quienes pagan sus pensiones? Pues todo currante en el sector privado y el personal laboral en el público. Otro grupo a considerar es el de los autónomos. No cotizan como aquí obligatoriamente con una cuota mensual, allí es voluntario o están exentos hasta los 30 años de edad y se acogen a un plan de pensiones privado, o un seguro de vida. Pues ahora meditan en el gobierno de Merkel que eso se acabó y vamos hacer como en esa España querida. Y finalmente a otro grupo se le va a tocar las narices: los políticos, los cargos electos con sueldo. Los diputados alemanes, ministros, alcaldes y concejales ¿de su sueldo no se cotiza nada de nada para la pensión de jubilación? No, porque tienen la consideración de equivalentes a funcionarios a la hora de cobrar jubilación. Resaltar que los alcaldes alemanes de ciudades de un tamaño similar al de Vigo se jubilan forzosamente a los 67 años, aunque sea durante el mandato. El día del cumpleaños les toca irse para su casa.