Ourense CF y Barco cruzan el ecuador en lucha por el ascenso

OURENSE

Miguel Villar

El Arnoia está resultando más competitivo en casa para agarrarse al objetivo de la permanencia hasta el final

28 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Dos bazas sólidas. El fútbol provincial sigue presentando candidaturas para el ascenso a la Segunda RFEF y, tras completar la mitad de la fase inicial, tanto el Ourense CF como el CD Barco están cumpliendo los plazos en su objetivo de pelear por el salto de categoría, pese a que la competencia es dura.

Los hombres de Rubén Domínguez fueron los que dejaron mejor sabor de boca, puesto que se marcharon al parón con un registro de seis partidos sin perder, que solo separó el revés ante el Somozas de su anterior secuencia de ocho jornadas puntuando de modo consecutivo. En suma, una regularidad notable de un conjunto que además de caer en el Candocia, solo fue sorprendido en la jornada inaugural ante el Noia.

Su índice de tantos encajados, por debajo del gol por partido, habla de una solidez importante, teniendo en cuenta que el Ourense CF dispone de un tridente tan fiable en la línea atacante como el que forman Iker Hurtado, Gabri Palmás y Amin, además de recursos para que goleen con regularidad los hombres de segunda línea o en las acciones de estrategia, donde también es un conjunto peligroso. Sus 30 puntos solo los supera el mencionado Somozas y el Polvorín, con 32, si bien el filial lucense contabiliza un partido menos.

Hasta los 28 llega el Barco. Al contrario del cuadro capitalino, los de Javi Rey tienen un problema serio en el balance defensivo y, con 22 dianas encajadas, están muy lejos de la efectividad de sus rivales directos. Eso sí, tras su inicio espectacular, mantienen números estratosféricos en el capítulo realizador, rozando con 30 goles la media de los dos por partido, casi un seguro para puntuar. Las cinco victorias consecutivas en el inicio fueron seguidas por otras cinco contiendas sin vencer, pero nadie puede descartar a los valdeorreses, atendiendo a su arsenal, con Javi Pazos a la cabeza y flechas como Duque y Óscar Martín, sin olvidar la calidad de Ivi Vales o David Álvarez, entre otros efectivos.

Por abajo, Iván González y su Atlético Arnoia eran conscientes de que era un año para sufrir y, al menos, consiguieron hacerse respetar en casa y más de una salida. Pendiente de recuperar su partido contra el Fabril, sus 9 puntos solo bastan para superar al colista Sofán y la barrera para abandonar las últimas cinco posiciones está a 6 puntos, si bien Noia y Juvenil de Ponteareas también tienen citas pendientes. El reto es complicado, pero el esfuerzo no se negocia nunca.