Los carballiñeses terminaron con nueve en una jornada en la que también se lesionaron dos de sus jugadores
20 feb 2022 . Actualizado a las 21:56 h.Más allá de cerrar su racha de seis partidos sin perder, el Arenteiro se vio inmerso en la vorágine de una de esas tardes en las que todo sale mal. Goleado 1-5 en el derbi ante el Pontevedra, padecieron los verdes dos expulsiones y están pendientes de una enfermería con noticias preocupantes.
Los visitantes se hicieron pronto con el esférico y, aunque los inquilinos de Espiñedo juntaron bien sus líneas y dificultaron las maniobras de los granates, también les costó pisar el área rival. Álex González fue el primero en poner a prueba al meta local, mientras que Uxío y Joseca también intimidaron a Pablo Cacharrón. Y, poco después, se rompió la baraja del modo más inesperado. Los pontevedreses fueron más listos en una acción de saque de banda, habilitan a Brais Abelenda y este cede a Álex González para que chute a gol.
El tanto desorientó a los carballiñeses, que comenzaban a rehacerse con nuevas intentonas de Adrián Cruz y Uxío, cuando encajaron la segunda bofetada con la expulsión del centrocampista de Moaña. El colegiado asturiano interpretó que pisaba en el gemelo a Álex González, cuando caía desequilibrado. Antes de que la escuadra verde llegara al descanso para lamerse las heridas, el ourensano Diego Seoane desvió de tacón un chut de Miguel Román que se convirtió en el 2-0. Otro mazazo.
Todo estaba en contra del Arenteiro y, aún así, la tarde fue a peor en la segunda mitad. En menos de cinco minutos, el arquero Diego García confirmó que no podía continuar, porque le molestaba un golpe en sus costillas y, además, Uxío Da Pena pedía asistencia médica al sentir un chasquido en su rodilla. Fran Justo se veía obligado a retocar todo su plantel, cuando ya jugaban con un hombre menos. Unidos ante la adversidad, sus futbolistas sacaban fuerzas para rebelarse, así que Eimil forzó una incursión a la que no llegó Sobrido por poco y Renan conectó con poco ángulo, obligando a parar a Cacharrón.
Y con la caída de la noche, la pesadilla se hizo más cruel. Pol Bueso reclamó un penalti a la salida de un córner y, a continuación, resultó expulsado tras derribar a Alberto Rubio, que se marchaba solo hacia la meta contraria. El elenco de O Carballiño se quedaba con nueve y el mismo jugador que forzó el libre directo, lo coló por la escuadra para subir al electrónico el 0-3.
Siguió sin rendirse el anfitrión y José Sobrido remató al fondo de la red un envío en acción de estrategia. Ángel Rodríguez le dio, de inmediato, más aire a su escuadra, con tres cambios, para evitar relajaciones y paliar el cansancio. Los pontevedreses no hacían sangre ante un enemigo con dos jugadores menos, pero un goleador como Rufo nunca renuncia a su misión y se revolvió al borde del área para marcar el 1-4, que aún engrosó Seoane en otro misil desde fuera del rectángulo, ya en el tiempo de alargue del encuentro.
En las oficinas de Espiñedo siguen pendientes de los diagnósticos de Uxío y Diego, así como de la factura en tarjetas de un partido que les mostró la peor cara de la temporada.
CD ARENTEIRO (1): Diego García (Iago Domínguez min 49), Eimil, Germán, Pol Bueso, Joseca, Álex Fernández (Portela, min 73), Renan, Adrián Cruz, Pibe (Cassio, min 73), Raúl Blanco (Marquitos, min 49) y Uxío (Sobrido, min 49).
PONTEVEDRA CF (5): Cacharrón, Seoane, Soto, Churre (Samu Santos, min 77), Samu Araújo (Oier, min 80), Miguel Román (Javi Rey, min 77), Álex González, Alberto Rubio, Yelko (Romay, min 77), Brais Abelenda y Charles (Rufo, min 55).
GOLES: 0-1, min 24: Álex González; 0-2, min 44: Seoane; 0-3, min 72: Alberto Rubio, de libre directo; 1-3, min 75: Sobrido; 1-4, min 87: Rufo; 1-5, min 94: Seoane.
ÁRBITRO: García Riesgo, del comité asturiano. Expulsó a los locales Adrián Cruz (min 41) y Pol Bueso (min 70).