Cada año se detectan 50 casos de enfermedad inflamatoria intestinal en Ourense

María Cobas Vázquez
maría cobas OURENSE / LA VOZ

OURENSE

Félix Rubial, Chari López y Fernando Jiménez, junto al nuevo baño para personas ostomizadas en el CHUO
Félix Rubial, Chari López y Fernando Jiménez, junto al nuevo baño para personas ostomizadas en el CHUO MIGUEL VILLAR

En la provincia hay 1.300 pacientes que son atendidos en la unidad del CHUO

21 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) es una dolencia crónica que está registrando una incidencia creciente. Además, está subiendo su prevalencia, en parte debido a que la calidad de vida de los pacientes ha mejorado mucho en los últimos 20 años y con los cuidados adecuados su esperanza de vida es el de cualquier otra persona. Así lo remarca el coordinador de la unidad de EII del CHUO, el médico especializado en aparato digestivo Pablo Vega.

Cada año se detectan entre 50 y 60 nuevos casos, que sumados a los que ya había anteriormente dejan el balance total en unos 1.300 pacientes en el área sanitaria de Ourense, Verín y Valdeorras. No hay una edad para que pueda manifestarse una enfermedad inflamatoria intestinal, hay casos en niños y otros detectados en personas que habían cumplido ya los ochenta. En todo caso, no es lo más habitual. «El pico de incidencia es entre los 20 y los 35 años», dice Vega, que asegura que no hay diferencia en la incidencia entre hombres y mujeres.

Es una enfermedad de la que no se sabe por qué se produce, aunque sí se conoce que intervienen factores genéticos (aunque no es hereditaria) y ambientales. El médico cita entonces el tabaco, la dieta a base de carne y alimentos procesados con mucho azúcar, la ausencia de lactancia materna y el parto por cesárea. Y también la microbiota. «Los cambios en la flora intestinal también influyen», resalta Vega, que incide en la necesidad de cuidarla.

Pablo Vega es médico especialista en digestivo del CHUO
Pablo Vega es médico especialista en digestivo del CHUO Santi M. Amil

Piden ecógrafos nuevos para evitar colonoscopias y pruebas radiológicas

Las enfermedades inflamatorias intestinales (como la colitis ulcerosa o el síndrome de Crohn) son crónicas. No tienen cura, por lo que los médicos buscan tratar los síntomas y evitar el daño a largo plazo en el intestino del paciente para que llegue a una edad avanzada con la mayor calidad de vida posible.

«Son pacientes para toda la vida que van a requerir muchas consultas y muchas pruebas», explica Vega. Cita entonces las colonoscopias, los TAC o las resonancias. Al menos hasta ahora. «En el servicio nos hemos formado en hospitales de referencia como La Paz, en Salamanca y Valencia, para poder implantar la ecografía, que es una prueba sencilla, barata y cómoda para el paciente que además se puede hacer en consulta», dice el médico responsable de la unidad de EII. Ahora lo están implantando, pero lo hacen con aparatos viejos. «Llevamos un tiempo pidiendo al Sergas que nos compren ecógrafos nuevos para poder incorporar la prueba plenamente», señala Pablo Vega. Destaca las ventajas del cambio: «Evita pruebas invasivas para los pacientes como la colonoscopia y ayudaría a reducir la lista de espera para las pruebas radiológicas porque la ecografía se puede hacer en la propia consulta», señala el médico especialista en aparato digestivo.

Ourense es la provincia de España con más baños para ostomizados

El jueves fue el Día Mundial de las Enfermedades Inflamatorias Intestinales, una fecha que la asociación de pacientes ACCU aprovechó para instalar una mesa informativa en el CHUO para dar a conocer su trabajo. Porque de los 1.300 pacientes que hay en la provincia, solo unos setenta forman parten de la entidad que preside Fernando Jiménez y que cuenta con algo más de un centenar de asociados. «Cubrimos a muchas más personas», remarca Jiménez, que explica que todavía hay mucha vergüenza asociada a la enfermedad. «Hay mucha gente que no quiere saber nada de nosotros porque no quiere que se sepa que tiene una EII», explica Jiménez. Desde ACCU trabajan para dar visibilidad al enfermo y a sus necesidades. «En muchos casos es una enfermedad incapacitante», relata. Además, añade, en ocasiones acarrea problemas laborales y escolares a los afectados.

El jueves fue también la fecha elegida por el CHUO para inaugurar el nuevo baño adaptado para personas ostomizadas. «Es importante y necesario», resalta Jiménez. De hecho, asegura que Ourense es actualmente la provincia española con más instalaciones de este tipo, con más de 50. Están fundamentalmente en edificios públicos de la ciudad, como el centro cultural Marcos Valcárcel, la Casa de Chocolate o el Pazo dos Deportes, pero también en privados (el centro comercial Ponte Vella). También en el balneario de Laias. Y fuera de la capital, hay baños para ostomizados en edificios públicos de A Peroxa, A Merca, Cartelle y San Cibrao das Viñas. «Seguimos con frentes abiertos para instalar más. La intención es que estén en todos los centros sanitarios y sociosanitarios de la provincia. Sabemos que están haciendo un esfuerzo al instalarlos, pero hay que esforzarse más y llegar a todos los sitios», dice Jiménez.