
El inmueble, que ahora alberga el Centro Cultural Marcos Valcárcel, fue concebido para tienda de venta al por mayor de seda, lana y algodón
25 nov 2022 . Actualizado a las 23:00 h.Uno de los edificios singulares de la ciudad de Ourense está de cumpleaños. El icónico Simeón celebra sus 125 años de historia. Nació como establecimiento para la comercialización de textiles y acabó convertido en Centro Cultural Marcos Valcárcel, de la Diputación de Ourense.
El origen de todo tiene nombre propio y origen conocido. Desde la sierra de Cameros, en La Rioja, llegaba a Galicia Simeón García Olalla a mediados del siglo XIX para instalarse en Compostela. Al camerano le fue bien el negocio, y pronto inició su expansión por el resto de la comunidad. En el caso ourensano la llegada tuvo su origen en una deuda comprometida por uno de sus clientes. De esta manera, según se recoge en una entrada del Arquivo Histórico de Galicia, Simeón García desembarcaba en Ourense al quedarse con la firma Rodríguez Orejas y Cía, que daría paso a lo que sería una sucursal de la casa central en Compostela que estaría dedicada a la «compra venta al por mayor y menor de seda, lana y algodón del Reino y extranjeros» en la ciudad ourensana.
La actividad de la sociedad precisaba de edificios singulares, acorde al negocio que se desarrollaba en las sucursales. Y nacía así el Simeón de Ourense, un inmueble encargado por el empresario riojano asentado en Compostela cuya construcción se llevó a cabo entre los años 1893 y 1897. Fue el arquitecto catalán Antoni Serra i Pujals el encargado de materializar los deseos del matrimonio compuesto por Simeón García Olalla y Juana Blanco Navarrete. El paso de los años y la expansión de las actividades hizo que el edificio fuese albergando otras secciones de negocio, y así llegó a la ciudad el Banco Simeón.
Originariamente el inmueble no era como se conoce hoy en día. Lo que actualmente es una construcción en forma de U que se asienta entre la Diputación y el obispado no contaba en su concepción original con la fachada que da a la calle del Progreso. La ampliación corrió a cargo del arquitecto bearicense Vázquez Gulías, que respetó la traza original y creó un nuevo volumen siguiendo el modelo del edificio primigenio.

El Simeón compaginó su faceta como sede comercial con la de vivienda de apoderados y gerentes de la empresa, pensión para empleados y, más adelante, con el uso de las plantas superiores como viviendas de alquiler.
La situación de los años 80 del pasado siglo pasó factura a los negocios de los herederos de Simeón García y Juana Blanco. El ajuste económico, la crisis social y el nuevo marco laboral propiciado por el fin de la dictadura y la aprobación del Estatuto de los Trabajadores. En dicho contexto, y arrasado por el éxito arrollador de Rumasa, el grupo Simeón empieza a escribir su final.
En el caso del edificio de Ourense, asociado ya históricamente al nombre de su promotor, la nueva etapa empieza en 1986. Es entonces cuando la Diputación provincial compra la propiedad. Diez años después se acomete el proyecto de reforma del conjunto, diseñado por los arquitectos Javier Suances Matías y Javier Suances Pereiro. El Edificio Simeón daba paso al Centro Cultural da Deputación de Ourense, más tarde rebautizado con el nombre de Marcos Valcárcel, y en la actualidad en el espacio conviven tres áreas perfectamente definidas: la centrada en las exposiciones y las actividades culturales, la referida a la formación y una tercera que tiene su referente en la Biblioteca Provincial de Ourense.