La oposición exige la reapertura del Museo Municipal, pero Jácome prevé licitarlo para una exposición permanente sobre el vino
02 dic 2022 . Actualizado a las 19:18 h.El pleno mensual del Concello de Ourense certificó este viernes la soledad del gobierno municipal de Gonzalo Pérez Jácome, que únicamente cuenta con el apoyo del no adscrito Laureano Bermejo, ex de Ciudadanos. Y, de igual modo, la sesión sirvió para demostrar que el alcalde mantendrá su hoja de ruta pese a los acuerdos que adopte de forma mayoritaria la corporación. Así ocurrió con el debate y aprobación de una moción de Ciudadanos que reclamaba la reapertura del Museo Municipal. Salió adelante con el apoyo de PSOE, PP, BNG y los no adscritos que en su día abandonaron Democracia Ourensana, pero Jácome no hará caso.
La oposición recordó al alcalde sus cambios de idea sobre el uso del edificio de la calle Lepanto. Primero propuso utilizarlo para oficinas administrativas, después habló de una muestra permanente sobre el entroido y, finalmente, apostó por un museo sobre el vino. Según dijo este viernes durante el debate plenario, Jácome mantiene esa última idea y, según precisó, la gestión de este espacio se licitaría para que se encargue de ella una empresa privada.
El caso es que el Museo Municipal lleva cerrado desde hace ya más de un año, pero ninguno de los proyectos anunciados para esas instalaciones se ha llegado a ejecutar. Se lo recordó, por ejemplo, la popular Sonia Ogando, que recordó que hace meses la oposición ya aprobó una moción para reabrir este espacio cultural. Según precisó, fue con el apoyo de 23 de los 27 concejales de la corporación, pero el acuerdo no se cumplió. «Menos mal que se llaman Democracia Ourensana», ironizó la edila.
La oposición volvió a unirse ayer con otros dos asuntos, además del relacionado con el Museo Municipal. Pepe Araújo, de Ciudadanos, defendió una moción que reclama la reactivación del Consello Local de Turismo, constituido el pasado verano y paralizado desde entonces. Pese a que la iniciativa solo tuvo los votos en contra de DO y del no adscrito Laureano Bermejo, Jácome descartó convocar ningún órgano de este tipo: «No creemos en esos comités de expertos que nos quieren vender». Según Luis Seara, del BNG, pretender que el alcalde se abra al diálogo «é como botarlle margaritas aos porcos». La popular Flora Moure dijo que a Jácome «escuchar le da muchísima urticaria, es como agua para un gremlin».
Por otra parte, en la sesión se debatió también sobre el complejo cultural de San Francisco. El PSOE defendió una moción que reclama un programación coordinada entre la Xunta y el Ayuntamiento para promocionar de forma adecuada este espacio. De nuevo, el resto de los grupos de la oposición apoyaron la iniciativa (PP, BNG, Ciudadanos y los no adscritos que dejaron DO) y solo se abstuvieron los concejales de Jácome y Bermejo.
Fiestas y animales
En varios momentos del debate, la oposición criticó la política cultural del gobierno municipal y Sonia Ogando recordó que la concejalía fue rebautizada con el nombre de Artes y Festejos, «más propio de los años cuarenta». Jácome defendió su modelo y acusó al resto de grupos de reírse de las orquestas. «Dejen que la gente elija el divertimento que quiera», dijo el alcalde. Precisamente, el popular Jorge Pumar preguntó por las fiestas que habrá el próximo fin de semana Mariñamansa y el regidor explicó que el gobierno municipal las está organizando por propia iniciativa. Avanzó, además, que hará lo mismo en otros barrios porque es «motivo de alegría y disfrute».
Por otra parte, PSOE y BNG criticaron la utilización de dromedarios y renos para las fiestas de Navidad y Jácome lo defendió por ser algo legal.
CRÓNICA POLÍTICA
La sesión plenaria más tensa de los últimos meses
En cuanto empezó el pleno, varios ediles de la oposición aludieron a un supuesto nerviosismo del alcalde, Gonzalo Pérez Jácome. «Nerviosa te pondrás tú, que eres la eterna segundona», le respondió el regidor a la nueva portavoz del PSOE, Natalia González, en referencia a la designación de Francisco Rodríguez como candidato a la alcaldía. La socialista manifestó su deseo de que los seis meses que quedan para las elecciones pasen «canto antes» y que, después, «sexamos o suficientemente maduros de non volver a colocalo aí». En similares términos se manifestó la popular Flora Moure, que dijo en varias ocasiones que, con Manuel Cabezas, la gestión volverá a estar a partir de mayo «en manos más sensatas y capaces». Jácome se preguntó, por su parte, si el candidato del PP volvía para «forrarse con el PXOM».
La tensión se disparó con una moción presentada por María del Mar Fernández Dibuja, concejala no adscrita que pedía la reprobación de Telmo Ucha como responsable de Seguridad Ciudadana (una área que ella misma llevó antes de dejar DO). El debate provocó un enfrentamiento entre ambos durante el que intervino el portavoz del BNG para decir que no le gustaba el tono de Ucha. «Si no te gusta, te jodes», dijo Jácome, que criticó la concesión de una distinción a la jefa de la Policía Local «por estar de baja o no sé qué».