El Arenteiro hizo historia en la Copa del Rey, reabrieron las termas, se estrena la película inspirada en el crimen de Santoalla o los incendios forestales asolaron Valdeorras fueron algunos de los titulares que más interés despertaron entre los lectores
31 dic 2022 . Actualizado a las 19:43 h.Ourense cierra un 2022 que estuvo cargado de noticias. Las hubo buenas y también las hubo malas. Algunas ayudaron a saber más sobre el entorno que nos rodea o sobre la salud y los temas que debemos cuidar. Todas disponibles en la versión en papel pero también en la web de La Voz de Galicia, donde fueron muchos los que mostraron interés por los titulares publicados. Los datos confirman que a los ourensanos (y también a los que se acercan a la provincia a través de la ventana al mundo que abre internet) quieren saber más sobre las noticias más cercanas. Les interesa la actualidad, lo que sucede cada día; y todo lo que afecta a la vida, desde la actividad municipal a la realidad sanitaria, sin olvidar los sucesos o lo que dictan los tribunales.
En enero el interés de los ourensanos se centró en la huerta. Fueron muchos los que quisieron conocer los secretos para realizar una buena poda de árboles frutales.
En febrero se notó el tirón del termalismo en Ourense. Reabrían parte de las termas de la ciudad después de dos años cerradas y había muchas ganas. Entre los que no quisieron perderse el primer día estaba el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, que no dudó en ponerse el bañador y darse un baño. Decía en voz alto algo ya sabido: «Esto es un lujo único en Europa».
En marzo el interés estuvo en la oferta de razas autóctonas del Inorde. En Ourense se pueden conseguir ejemplares de gallinas de Mos a un euro y de cabras gallegas a 40 para poner en marcha una explotación ganadera.
En abril toca elegir colegio para los niños que en septiembre inician la etapa escolar, un tema que despierta el interés de padres, abuelos y demás familiares. Y frente a lo que sucedía otros años de que en la ciudad y en su área metropolitana había muchos niños que no podían entrar en el colegio elegido por sus padres, esta vez solo siete se quedaron fuera del centro marcado como preferente. La baja natalidad deja plazas libres en todos los colegios ourensanos, salvo uno.
Mayo trajo varias noticias que atrajeron a decenas de miles de lectores, incluso cientos en algunos casos. Dos destacaron sobre las demás por el interés generado. Por un lado está la entrevista al dermatólogo Ignacio Suárez, que habló claro sobre cómo cuidar la piel y explicó cuando es necesario consultar sobre un lunar. «La mejor crema de belleza antiarrugas es un fotoprotector», aseguró el especialista del CHUO. También relacionado con la salud, por lo que pudo haber sido y (por fortuna) no fue está el colapso que sufrió la rúa Dalí durante la actuación de la orquesta Panorama. Había tanta gente metida en la calle que se convirtió en una ratonera y desde la orquesta tuvieron que parar la actuación para pedir a la gente que no siguiera apelotonándose en la zona.
En junio muchos se sintieron atraídos por la historia de Yovita Fernández Campos, una ourensana que se reinventó pasados los 50. «Me quedé en el paro y vi en la FP una oportunidad», contaba.
En julio los lectores quisieron saber más del fallecimiento de Cristina Mariño. La hija del diseñador Roberto Verino, que había cogido el testigo de su padre en la firma de moda, fallecía a los 52 años víctima de una leucemia. También fueron muchos los que recurrieron a La Voz para informarse del gran incendio forestal que arrasó más de 10.500 hectáreas en la comarca de Valdeorras, llevándose por delante más de medio centenar de viviendas.
En agosto, Ourense dio una lección de principios. Los responsables del bar del club náutico de Castrelo do Miño echaron a unos clientes por un comentario xenófobo hacia un empleado. Lo comentaron en Twitter y la respuesta fue unánime: aplauso y apoyo total. Además, la bajada del cauda del embalse de As Conchas despertó el interés de los lectores. Dejaba a la vista el campamento romano de Aquis Querquennis.
En septiembre volvieron a la actualidad informativa los incendios forestales. Aunque esta vez no es que hubiese fuego, sino detenidos. Las investigaciones dieron sus frutos y tres vecinos de A Pobra de Trives y Chandrexa de Queixa, entre ellos un brigadista de 19 años, eran puestos a disposición judicial acusados de provocar varios fuegos en las provincias de Ourense y Lugo. La jueza los envío a prisión.
En octubre los lectores se centraron en dos sucesos trágicos. Ese día 19 se iniciaba la búsqueda de un avión del servicio contraincendios que había salido de Doade en dirección a Córdoba que desapareció cuando cruzaba Ourense. El piloto había alertado de que las condiciones meteorológicas no le permitían seguir la ruta marcada y que se desviaba al aeropuerto de León. Nunca llegó. Dos días más tarde se localizó la avioneta, que había impactado contra una de las montañas del macizo de Pena Trevinca. En el interior de la aeronave se recuperó el cadáver del sevillano Santiago Durán. El día 26 fallecía Manuel, un adolescente de la ciudad que estudiaba en el IES Julio Prieto Nespereira. Murió al quedar atrapado debajo de un muro de 1.400 kilos de peso que se derrumbó.
En noviembre fue Geli González la que consiguió más clics. Ella es la gallega que cambió su vida pasados los 50 por cultivar setas milenarias. Tiene su explotación en A Pobra de Trives.
Para despedir el año, cine, pasteles y fútbol. En el apartado del séptimo arte, el estreno de la última película de Rodrigo Sorogoyen trajo de nuevo a la actualidad el homicidio de Martin Verfondern. Está basada en el crimen de Santoalla y fueron muchos los que quisieron saber quienes eran los protagonistas de la historia real que inspiró «As Bestas». Y diciembre quedará en el recuerdo como el mes en el que el Arenteiro hizo historia en la Copa del Rey. El sueño del equipo de O Carballiño duró ochenta y nueve minutos ante un Atlético de Madrid con todas sus armas (1-3). También fue el mes de la jubilación de José Antonio Lorenzo y Chari Ramos, que cerraron la confitería Pombal de Xinzo tras 37 años. Fueron tiempos de mucho trabajo: «Vendíamos una media de 200 brazos de gitano cada fin de semana». Y ahora toca descansar.