Roombo, de facturar 2,4 millones con el reparto a domicilio al concurso de acreedores por un fondo inversor
OURENSE
Roombo, que nació en Verín en plena pandemia, llegó a estar en poblaciones de Galicia, Navarra, Baleares o Valencia
29 oct 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Roombo, la firma de reparto a domicilio que nació en Verín en plena pandemia y que dos años después facturaba 2,4 millones de euros, ha presentado en el juzgado de Ourense una solicitud para entrar en concurso de acreedores. Detrás de esta situación está el que era ahora su socio mayoritario, el fondo de inversión Stator Management, que hace algo más de un año se hizo con el 51 % de sus acciones, y un embrollo judicial en que también están involucrados el fondo de inversiones Gedesco y su socio mayoritario, el estadounidense JZI.
La necesidad de crecer de esa empresa ourensana nacida en Verín, que llegó a abrir, entre otros lugares, en Chaves, Ourense, Ribadavia, Redondela, A Estrada, Ponteareas, Vigo, Tui, Porriño, Cangas, Moaña, Estella (Navarra), Mahón y Ciudadela, la llevó a buscar financiación para poder mantener su estructura, dejando todo el poder al fondo de inversiones, cuyos gestores tiene actualmente varias causas pendientes en los juzgados.
Stator Management fue creado en el año 2018 por Máximo Buch, exconseller valenciano de Economía, y su socio, Ernesto Bernia Martí. Su objetivo era impulsar empresas en su fase de crecimiento, sin importar el sector. Este fondo, filial entonces de Gedesco, una empresa de financiación no bancaria, se puso en contacto con los propietatrios de Roombo, que ya estaba implantado en Valencia, para participar de la empresa de forma mayoritaria. El 51 % era el porcentaje habitual que pedía Stator a las pymes que ayudaba.
En poco tiempo saltó a la luz el denominado «caso Gedesco», acabado de forma fulminante con el sueño de Rombo, que se vio involucrado en un embrollo judicial del que también forma parte la americana JZI, que posee la mayor parte de la acciones de Gedesco.
El cruce de acusaciones entre esta empresa y JZI nació en marzo de 2022 cuando el estadounidense demandó en Nueva York a los responsables del fondo español, Miguel Rueda y Ole Groth, sus dos exdirectivos, a los que se encomendó la gestión de la empresa española, por la presunta distracción de 80 millones de euros hacia Stator Management. Una denuncia que más tarde fue retirada.
A finales de ese mismo año, los propietarios de Gedesco ejercieron su derecho de compra del 100 % de Stator Managment y la registraron ante notario junto al cese como administradores de la compañía de Buch y Bernia. Al conocer la decisión, el exconseller valenciano y su socio la inscribieron en el registro mercantil, nombrándose administradores únicos de la sociedad, un día antes de que se fuera a consumar la compra. Esto llevó a Gedesco a llevar a los tribunales a sus exsocios acusándoles de, entre otros cargos, delito de falsedad documental, administración desleal y delito societario. A mediados de este año se sumó otra denuncia contra ellos por apropiación indebida. Según los denunciantes, se les había encargado vender una compañía por cuatro millones de euros y, estos, en lugar de realizar una venta directa a través de Stator, crearon una sociedad para quedarse con parte del dinero.
De forma paralela, Gedesco ha dado la vuelta a la tortilla de la denominada «trama Stator» acusando a los propietarios de JZI de haberse aliado con Buch y Bernia. Además, han presentado un denuncia en el juzgado reclamando una indemnización por los daños causados por las acusaciones vertidas sobre ellos.
Mientras se dirime y se desenreda en los tribunales toda la trama, la empresa verinesa hace las maletas para cerrar sus puertas.