Una estrella fugaz guio este año a los Reyes Magos en el belén viviente de Dacón

María Doallo Freire
María Doallo OURENSE

OURENSE

Noventa vecinos participaron este año en la puesta en escena del nacimiento, que es la tradición más especial de la Navidad en la pequeña aldea de Maside

25 dic 2023 . Actualizado a las 17:37 h.

«Esto tenían que hacerlo mejor en verano», le decía una amiga a otra cuando ya se iban. Pero nada, ni el frío, que hasta provocaba que hubiese escarcha sobre la hierba en las zonas en las que no daba el sol, puede con el belén viviente en Dacón. El año pasado la lluvia obligó a que se hiciese dentro de la iglesia de este pequeño pueblo de Maside, pero esta Navidad la representación volvió a su espacio original, en la carballeira. La iniciativa popular cumple 36 años y es capaz de seguir innovando para sorprender a todos los vecinos y turistas que deciden pasar el día 25 de diciembre disfrutando de la tradición de Dacón. La escenografía, el guion, las acciones de cada personaje... todo ello lo organizan entre menos de cinco personas. Una de ellas es Rodrigo González. «Levo participando no belén dende que comezou a facerse, eu tiña 11 anos», admite. Entre las novedades que se sumaron en el 2023 hubo un espacio con colmenas, aunque el añadido más especial fue una estrella fugaz, que se deslizó por un cable desde la parte alta de la carballeira hasta el pesebre, guiando de esta forma a los Reyes Magos de Oriente. «Ata agora sempre estivo posta directamente no portal, pero este ano lanzámola e o resultado foi moi chamativo para os cativos», afirma Rodrigo.

En ese pesebre estaban María y el niño Jesús. «Coma sempre, un bebé de carne e óso, que é precisamente o que máis lle gusta e lle sorprende á xente. E por sorte en Dacón hai boa natalidade así que cada ano é un neno distinto», cuenta el organizador de la cita. El de esta Navidad fue Enzo, de siete meses. Su madre es Ángeles Soraya, vecina de Dacón, que lleva participando en el belén desde que era niña y para quien no fue la primera vez interpretando a la Virgen. «En el 2012 me tocó hacerlo con mi primera hija y ahora con Enzo. La verdad es que se portó muy bien y salió perfecto», afirma.

La mayoría de personas que participan en el belén viviente lo hacen desde que comenzó la tradición, pero para algunos meterse en la piel de los personajes es una novedad. Los primos María Fernández González y Juan Manuel Ferradás González, hijos de dos hermanas de Dacón, empezaron el año pasado. «Los dos hicimos de niño Jesús cuando éramos bebés», comenta María. «Luego seguimos viniendo a verlo año tras año, pero nunca antes nos habíamos animado a participar. La verdad es que es algo que nos tira mucho y nos apetecía probar», continúa José Manuel. Los dos describen la experiencia como muy buena. La de este año mejor porque por fin pudieron vivirlo al aire libre en la carballeira. María hizo de ayudante en el puesto de pan y José Manuel, de pastor, aunque el año que viene quiere cambiar a soldado. Precisamente las casetas, hechas con tablas de madera, que están salpicadas por toda la zona arbolada, son otro de los grandes atractivos de la cita, el que más trabajo da. Los propios vecinos que participan se encargan de cocinar los alimentos que regalan en cada puesto. Además del de pan, hay uno de empanada, otro de bollos preñaos, de bizcochos y hasta de chocolate caliente. En uno hacen caldo gallego y en otro hay un cortador de jamón.

«A verdade é que temos moitas ideas, pero o tempo é o que é», dice Rodrigo González. La organización empieza a preparar la cita a principios de diciembre y es entonces cuando empieza a apuntarse la gente. «Este ano estamos contentos porque tivemos máis representación que outras veces, case 90 persoas. Parece que a xente se vai animando e iso é o máis importante», termina.