El Ourense CF frena al Andorra y nutre con un empate su reacción (0-0)

El largo proceso para relevar a Rubén Domínguez en el banquillo del Ourense CF ha resultado productivo y, después de una victoria en Liga y otra en Copa del Rey, la libreta del interino Adrián Abalo llevó a los azulones a un nuevo empate frente a uno de los gallitos del grupo, el recién descendido Andorra, que también puede dar por bueno el punto, tras jugar algo más de media hora en inferioridad numérica: 0-0.

Ambos técnicos intentaron imponer dos modelos que diferían en muchos aspectos. Los visitantes con un 4-3-3 que intentaba dar vuelo a sus laterales por los costados, mientras que los ourensanos se situaban un 4-4-2 que mutaba en defensa a una línea de cinco, puesto que Álex Gil era un carrilero muy profundo por la derecha, además de sacrificarse en la línea de retaguardia.

Alberto Gil, por su parte, intentaba aprovechar los espacios que creaba Carbonell en la vanguardia y suyo fue el primer disparo, que desvió Oier Olazabal a córner. Manu Nieto y Luismi Redondo no llegaron por poco a la réplica de la escuadra del Principado, que a pesar del buen pie de muchos de sus futbolistas no eran capaces de crear serio peligro. Su mejor intentona fue la del talentoso Álvaro Peña, que puso a prueba a Marqueta desde el balcón del área, una moda a la que se sumaron Jerin o Del Olmo, a la vista de que era complicado pisar área. La mejor entente local la mandó a córner otra vez Oier, cuando Jerin asistió a Alberto Gil y el remate del valenciano lo expulsó el guardameta.

La estrategia le concedió otra opción más al capitán, que no salvó la barrera por poco en un libre directo pegado al borde del área y que provocó otro córner.

En el intermedio, Ferrán Costa quiso matar dos pájaros de un tiro en la caseta de los forasteros. Retiró a Erik Morán, su único futbolista tarjeteado y le otorgó mayor mordiente a su once, con la entrada de Álvaro Martín. Marqueta tuvo que adelantarse a una internada de Clemente por el carril diestro, pero ese cambio de actitud del Andorra no llegó a traducirse en ocasiones y, en menos de un cuarto de hora, el escenario se desmoronó con la tarjeta roja directa al central César Morgado, que pugnó con excesiva dureza con Jerin en un balón dividido, entrando con los tacos por delante.

La sirena del Ourense CF tocó la señal de ataque y sus jugadores se animaron a mirar hacia la portería contraria con mayor decisión. Los andorranos no tardaron en llamar al campo a Pablo Trigueros y prescindían tanto de Peña como de Manu Nieto. El partido se teñía de azul, pero tampoco fue capaz de generar demasiado fútbol vertical, ante un rival que blindó bien su puerta, con el pesar de también renunciaba a buena parte de sus armas ofensivas.

El carrusel de cambios no bastó para darle más colmillo fútbol ofensivo. En el caso de los visitantes, un balón parado de Álvaro Martín que se estrelló en la barrera fue su máxima esperanza, mientras que el cabezazo del central Fran Carmona, en otra jugada ensayada abrió, abrió sin ver portería la última andanada de los anfitriones. Le secundaron Jairo, cruzando demasiado el cuero, y Del Olmo, que finiquitó una diagonal perfecta con un chut que se le marchó alto.

El choque era de empate, porque los visitantes se aferraron al punto y los de Adrián Abalo no tuvieron la chispa necesaria para engarzar la tercera victoria consecutiva del técnico vigués, que cerraba su interinidad con cuatro puntos de seis en el torneo regular y el billete para la próxima eliminatoria copera. Pablo López asumirá la responsabilidad en el primer entrenamiento de la semana.

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