Herme Estévez, matrona: «A los 45 años empiezan los desarreglos previos a la menopausia»

OURENSE

La profesional imparte un taller sobre climaterio en el centro de salud Valle Inclán de Ourense
20 mar 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La menopausia está ahí. Antes o después, toda mujer va a pasar por ella. «Estadísticamente hablando, a partir de los 45 años empiezan los desarreglos hormonales», dice la matrona Hermelinda Estévez. En ese momento llegaría el climaterio. La menopausia no se considera como tal hasta que la mujer pasa un año sin la regla. Cuándo va a producirse depende de varios factores, pero Herme, como todos la conocen, dice que el que más pesa es el genético. Por eso, señala, cualquier mujer puede hacerse una idea rápido preguntándole a su madre cuándo entró en esa etapa.
Con los desarreglos llegan los primeros síntomas. Cita los calores, la sequedad vaginal y la falta de libido, el aumento de peso o los cambios en la piel. Esos son los cambios más frecuentes en los diez primeros años, que son también los síntomas más llamativos. Pasada una década, la menopausia se relaciona con la osteoporosis y las enfermedades cardiovasculares. «Es un proceso fisiológico, pero hay alivio», destaca la matrona. De hecho, su experiencia laboral le sirve para saber que la calidad de vida de muchas mujeres mejora de manera importante con una crema o unas pastillas, según el síntoma a tratar. Por eso refuerza la idea de que la información es poder y con ese objetivo hace dos años Herme empezó a dar un taller de menopausia en el centro de salud Valle Inclán de Ourense. «El objetivo es informar a las mujeres de los cambios que van a surgir», explica.
Está compuesto de cuatro sesiones que imparte de manera cíclica (es decir, la semana después del cuarto taller vuelve al primero) por lo que no hay que esperar a una fecha en concreto para empezar. Cualquier miércoles es un buen momento y una vez pasadas las cuatro semanas, taller rematado. Las sesiones son de 18.00 a 19.30 horas y están abiertas a todos los interesados, también hombres. Reconoce Herme que estos son los menos, pero alguno ha pasado ya por sus clases también. Las personas interesadas en apuntarse pueden hacerlo directamente en el centro de salud. La asistencia a los talleres quedará reflejada en su historia clínica.
La matrona aprovecha esos encuentros para insistirles en la importancia de hacerse las citologías para detectar de manera precoz posibles casos de cáncer de cérvix. Y siempre hay tiempo para dar unas pautas de ejercicio físico relacionado con las cervicales y el suelo pélvico. Por supuesto, no faltan las referencias a las pérdidas de orina. «Que una mujer las tenga con hacer un esfuerzo o durante el coito no es normal, hay que consultarlo», insiste.
Dice que lo que más preguntas genera por parte de las asistentes es la obesidad asociada a esa etapa de la vida, aunque reconoce que cuando es ella la que pregunta, rápido aparecen también la sequedad o la disminución de la libido. Son síntomas que pueden aliviarse con medicación y muchas mujeres refieren una mejoría en su situación. Herme aprovecha también para hablar de la andropausia, el descenso de los niveles de testosterona en los hombres. A ellos también les afecta la edad en lo que a libido de refiere, aunque de eso se hable menos.
Herme basa todo lo que cuenta en el rigor científico. Se avala en la Asociación Española de Estudios de la Menopausia, que edita menoguías que están accesibles también para los pacientes.
¿Y tiene algo bueno? «Yo siempre digo que es una etapa más en la vida, en la que las mujeres estamos más serenas y tenemos otra perspectiva. Estamos vivas y tenemos otra sabiduría y aplomo», contesta.