Un año de cárcel para el propietario de trece perros que dejó morir de hambre y sed a siete de ellos en su finca de Celanova
OURENSE

Otros seis rottweiler del acusado fueron localizados extremadamente delgados por los agentes del Seprona
08 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Lo que los agentes de la Guardia Civil se encontraron el 2 de enero del 2023 en una finca situada en Vilanova dos Infantes (Celanova) era un escenario de horror. Los agentes del Seprona acudieron al lugar para hacer una inspección y se confirmaron las peores sospechas. En el terreno había siete perros muertos y otros seis en grave riesgo de acabar de la misma manera. Se comprobó que los animales no tenían acceso a comida ni bebida y que las condiciones en las que se encontraban eran insalubres.
El propietario de los animales no tardó en ser detenido y este lunes compareció ante la magistrada del Juzgado de lo Penal 1 de Ourense acusado de dos delitos de maltrato animal. Aunque inicialmente se pedía para él una condena de 18 meses de prisión, finalmente el tiempo de privación de libertad quedó ligeramente reducido al admitir los hechos y alcanzar un acuerdo la defensa y la Fiscalía.
Según eso, Tomás N. D., cumplirá un año de cárcel, quedando además inhabilitado para ejercer cualquier tipo de profesión relacionada con animales durante dos años y tres meses. En ese tiempo no podrá tampoco estar en posesión de mascotas ni comerciar con ellas, bajo riesgo de incurrir en un delito de quebrantamiento de condena. A mayores, pagará una multa a la justicia de 60 euros e indemnizará al centro de recuperación de la fauna de la Xunta, situado en O Rodicio, por los gastos que supuso el cuidado de los seis perros que sobrevivieron.
Los animales, tal y como recoge un escrito de acusación que ahora queda probado, eran de raza rottweiler. El acusado los tenía desde el año 2020 y todo indica que en un primer momento los cuidó debidamente, hasta que se desentendió de ellos. «De manera consciente e injustificada dejó de prestar los cuidados básicos a los cánidos», sostiene el informe de la Fiscalía, que destaca que los perros estaban en unas instalaciones inadecuadas, «sin comederos, ni bebederos y con una condiciones higiénicas de suciedad exageradas». Siete de ellos fueron encontrados muertos y se determinó que la causa había sido en todos los casos la «inanición», ya que no presentaban síntomas de otras enfermedades. Las necropsias detallaron sus «prominencias óseas visibles» y que apenas tenían grasa ni masa muscular. También se constató que en su cuerpo no había evidencias de haber ingerido comida o bebida desde hacía mucho tiempo. El propietario, de 46 años, los abandonó en la parcela y dejó que fueran muriendo poco a poco.
En cuanto a los seis supervivientes, tres de los cuales ni siquiera tenían microchip, se encontraban en situación de «extrema delgadez» cuando fueron recuperados por los agentes y trasladados al centro especializado que tiene la Xunta, donde pudieron recuperarlos y sacarlos adelante a pesar de la gravedad de su estado.