
La sesión dio cuenta de la renuncia de dos concejales
28 mar 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Trives celebró ayer su primer pleno ordinario en once meses, que comenzó sin poder aprobarse el acta de aquella sesión porque todavía «está pendiente», según explicó la alcaldesa, la socialista Patricia Domínguez, sin dar más explicaciones de ese retraso. Después se dio cuenta de la dimisión de los concejales Roberto González (del PP) y Aarón Álvarez, que era teniente de alcalde además de responsable de Economía e Facenda, Medio Ambiente y Medio Rural. Ninguno de los dos asistió a la sesión. Sin debate y por unanimidad se aprobó el proyecto de mejora del campo municipal de O Agro, cifrado en 500.000 euros.
Comenzó entonces el turno de ruegos y preguntas, en las que el nuevo portavoz de la oposición, Luis Araújo, se interesó por varias cuestiones. Una de ellas fue el servicio de ayuda a domicilio, que no llega a todos aquellos que la tienen concedida, lo que ha generado quejas. «Si nos dice un solo sitio que la tenga reconocida y no se esté prestando, los primeros en tomar medidas seremos nosotros», aseguró Domínguez, ante lo que el edil de la oposición Francisco Vázquez respondió: «Mi padre. No me toques las narices, hombre». Replicó la alcaldesa que es una competencia impropia que asumen los concellos pero que corresponde a la Xunta, para después reclamar que se incremente la aportación. Reconoció entonces que hay lista de espera.

Se interesaron también por el plan CooperOu, que se destinará al arreglo de la carretera de Santa María; los desplazamientos del vehículo adaptado; o el destino de los 70.000 euros «que se van a ahorrar con la salida de Aarón» (ese sería su salario bruto para los dos años que restan de mandato). Ese se tornó el punto más bronco. «En cuanto a que se estaba tirando un sueldo, yo le pido respeto por un compañero que acaba de dimitir», dijo. La bancada del PP replicó que no habían dicho eso, pero Domínguez les quitó la palabra llamándoles al orden. «Estamos amordazados», replicó Araújo.