. La Fundación Ramón González Ferreiro, con sede en Paciños (Allariz), acoge en sus instalaciones un campamento de verano para niños de entre 8 y 13 años. Hoy toca despedirse. Por este año el campamento pone punto y final, cerrando sus puertas. Lloros, promesas y muchas ganas de repetir para el próximo año, eso era lo que auguraban ayer muchos pequeños para esta última jornada. Estas actividades de verano no solo suponen una forma de conocer a otros niños de la misma edad, si no aprenden a respetar normas y a interactuar con el medio ambiente, cosa que muchos de estos niños no pueden hacer debido a que viven en la ciudad. En el campamento, todos son iguales, se levantan y se acuestan a la misma hora y no está permitido decir «no me gusta» a la hora de comer. Visita a O Rexo. Entre las múltiples actividades que desarrollaron a lo largo de los últimos días, está la visita a O Rexo, que tuvo lugar ayer. Allí los niños recibieron una clase sobre la fauna y la flora de Galicia. A continuación fueron al establo donde se encontraban guardadas las ovejas. Además de acariciarlas acudieron a la sala de ordeño, donde vieron como funciona el mecanismo de sustracción de leche de estos animales. Finalmente visitaron la quesería donde visualizaron el proceso de elaboración de este producto. La visita a O Rexo no es la única llevada a cabo estos días en los que los niños permanecieron en el campamento. También conocieron Allariz, donde se familiarizaron con la pequeña villa, y Xunqueira, de cuyas piscinas disfrutaron. Se trata de una buena forma de hacer amigos.