El plan de Chipperfield en una aldea modelo avanza con un centro social

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

CARBALLEDA DE AVIA

Los arquitectos Daniel Magide, Eduardo Dipre y Miguel Ángel Díaz, ayer en una visita a Muimenta acompañados por el alcalde de Carballeda de Avia, Luis Milia.
Los arquitectos Daniel Magide, Eduardo Dipre y Miguel Ángel Díaz, ayer en una visita a Muimenta acompañados por el alcalde de Carballeda de Avia, Luis Milia. Santi M. Amil

El proyecto transformará unas ruinas en un espacio público en Carballeda de Avia

25 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Carballeda de Avia (1.218 habitantes) continúa dando pasos para convertir a la aldea modelo de Muimenta en un referente arquitectónico. El plan desarrollado por la Fundación RIA, creada por el arquitecto británico David Chipperfield, avanza con la resolución del concurso para la construcción del centro social, que permitirá transformar una ruina en un nuevo espacio de referencia para todo el municipio. Se trata de una iniciativa que cuenta con el respaldo financiero de la fundación MOP, liderada por la presidenta de Inditex Marta Ortega. El proyecto seleccionado se denomina Socalcos y el jurado ha destacado su capacidad «para conservar las características del terreno, evitando alteraciones significativas y manteniendo un fuerte vínculo con la topografía natural de la parcela». Lo ha hecho, según detallan, «poniendo en valor lo relevante de manera sencilla».

La propuesta del joven equipo integrado por el arquitecto gallego Daniel Magide, junto a Eduardo Dipre y Miguel Ángel Díaz, del estudio bilbaíno Based Architecture, ha sido seleccionada de entre los 31 proyectos que se presentaron a concurso. El presupuesto estimado para su ejecución es de 383.000 euros. La intervención actúa sobre dos zonas principales, la antigua casa y un espacio exterior que denominan pabellón. En el primero de ellos proponen la rehabilitación de la antigua construcción y el acondicionamiento del primer bancal como acceso principal, convirtiéndolo en un espacio de trabajo para cursos o exposiciones. En el interior se actuará para convertir los dos niveles de la casa en espacios flexibles, sin jerarquía y conectados entre si mediante una escalera interior. Para acometer la ampliación del inmueble se apuesta por el segundo bancal planteando un pabellón multiusos para actividades libres. En la tercera zona de intervención se reserva espacio para la energía fotovoltaica y las huertas, mientras que el cuarto bancal permanecerá como está pudiendo usarse para plantar especies autóctonas. De acuerdo con la memoria del proyecto ganador de este concurso, la vivienda contará con una superficie de 166 metros cuadrados, repartidos en una sala de trabajo común, una oficina independiente y un aseo en la planta baja, y una zona polivalente y una galería en la planta primera. Por su parte, el pabellón contará con 65 metros cuadrados de superficie construida y tendrá una sala común y una cocina, además de un aseo y una cocina exterior.

Para la climatización, el proyecto propone un sistema de aerotermia por estar considerada como muy eficiente. Se completará con paneles fotovoltaicos. La iniciativa de las fundaciones RIA y MOP tendrá continuidad, con transformaciones urbanas en A Pobra do Caramiñal y el diseño de un nuevo parque empresarial en Porto do Son.