La Xunta asegura que la senda de 4 kilómetros que cruza Ourense de norte a sur se podrá estrenar este verano

La Xunta da por concluido el proyecto de humanización de la avenida das Caldas que incluye el primer tramo de la senda peatonal y ciclista que cruza Ourense de norte a sur. La conselleira de Vivenda, María Martínez Allegue, recorrió este sábado parte de los 400 metros del trayecto entre el puente Romano y la estación intermodal, en el que se han invertido 1,4 millones de euros con cargo a los fondos Next Generation. Lo hacía acompañada, entre otros representantes institucionales, del director de la Axencia Galega de Infraestruturas, Francisco Menéndez.

Él fue el encargado de explicar, en una pequeña isla de descanso creada en esa avenida, el trabajo realizado y también la parte del proyecto que no se ve. «Non estaba previsto, pero por facilitar un pouco a durabilidade da actuación e coordinarnos co Concello, fíxose unha renovación completa de servizos. As tubaxes de abastecemento estaban en mal estado, eran de fibrocemento, e cambiáronse por outras de fundición que van a ter unha vida útil moito maior», señaló. 

Menéndez reconoció que la imagen final no es exactamente la misma que aparecía en el proyecto. Apuntó que la glorieta que enlaza con la estación de tren es provisional, ya que la rotonda definitiva la tendrá que ejecutar ADIF en el marco de las obras de la intermodal. Tampoco están los árboles previstos. «Foi imposible pola aparición dunha galería de servizo soterrada de pluviais de formigón nunha das marxes e dun dado de telecomunicacións tamén do outro lado polo que, de forma consensuada co Concello, se dispuxeron xardineiras e se habilitou unha zona estancial», aclaró. Falta además un semáforo para regular el paso de las bicicletas en el cruce central de la avenida. Su instalación, señaló, la hará el Concello de Ourense.

Este primer tramo de la senda ofrece un itinerario mucho más seguro para los peatones, que disponen de aceras más anchas —en la margen izquierda, que coincide con el Camino de Santiago, es de entre 3 y 5 metros— y un carril bici segregado del resto del tráfico viario. Cuando todo el proyecto esté terminado los ciclistas podrán iniciar el recorrido en la estación ferroviaria y concluirlo en la zona de Expourense y el Paco Paz, pero también pueden conectar con las sendas que recorren las orillas del Miño. «En conxunto conforma unha rede de sendas que permitirá revolucionar a cidade e habilitar unha infraestrutura que permita realmente un uso seguro da bicicleta para a mobilidade cotiá», señaló.

Menéndez aseguró que ya está también definida la solución para conectar la ruta desde A Ponte con la calle Pardo de Cela. «Terá unha envergadura maior do inicialmente previsto e unha afección ao tráfico importante», dijo. Anunció que se esperará a que termine el período escolar para ejecutar esa fase. También se ha retrasado más de lo previsto el trabajo en el paseo del Barbaña, especialmente entre la plaza de Abastos y La Molinera. «Apareceu un estribo da antiga ponte Pelamios e unha calzada e houbo que integrar eses achados na solución técnica do que se vai executar. A día de hoxe está feita a cimentación da pasarela, que houbo que encaixar entre a zona inundable da Confederación Hidrográfica, a tubaxe que pasa por alí e o estribo da ponte e garantido a accesibilidade», relató. Aseguró que, pese a ese retraso, ese tramo también estará terminado en plazo.

«Neste verán veremos que é unha realidade a posibilidade de transitar nunha bicicleta dende a intermodal ata o Paco Paz e así o faremos», aseguró la conselleira. María Martínez recordó que la inversión global del proyecto, que asciende a 5,4 millones, refleja la apuesta de la Xunta «por unha mobilidade sostible que prioriza o uso peonil fronte ao tráfico rodado» y también la voluntad de «colaborar cos concellos, como neste caso co de Ourense», para materializar esas sendas en las zonas urbanas.

---

---

---