Los fondos Next Generation podrían ser una solución para abordar proyectos conjuntos
29 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Apenas 45 minutos de distancia en coche separan Ribadavia y Vigo, factor al que ayer se agarraron la alcaldesa del municipio ourensano, Noelia Rodríguez, y el delegado del Estado en el consorcio de la Zona Franca de la ciudad olívica, David Regades, que visitaron el parque empresarial ribadaviense, inmerso en la tercera fase de desarrollo, para explorar posibles vías de colaboración.
Regades aseguró que «Zona Franca llega a Ribadavia para quedarse e impulsar la economía del municipio», y aludió a los fondos Next Generation como una oportunidad a tener en cuenta. «La Zona Franca ha presentado varias manifestaciones de interés con proyectos centrados en la automoción, el hidrógeno y los chips fotónicos», apuntó. En este sentido, la regidora de Ribadavia aludió al proyecto de la fábrica de baterías, y expuso su preocupación «por crear empleo» y también la necesidad de «suelo empresarial para atraer firmas al municipio, que nos permitan fijar población, especialmente entre los más jóvenes».
Rodríguez expuso el caso concreto de la empresa de componentes asociada a la factoría viguesa del grupo Stellantis que está situada en el polígono de Ribadavia. «También otras del sector de congelados», agregó. Tanto el delegado del Estado como la alcaldesa visitaron la firma de Frigoríficos Fercon, instalada desde hace cuatro años en el parque empresarial de Ribadavia y cuyo grupo nació en el puerto de Vigo, donde sigue operando y exportando a países como Sudáfrica, China, Angola y los Estados Unidos, entre otros.