La fiesta de exaltación del producto acogió varios concursos
09 oct 2023 . Actualizado a las 17:03 h.La Festa da Pataca de Vilar de Barrio cumplió 44 años como escaparate y, sobre todo, puesta en valor de uno de los productos estrella de A Limia y motor de toda la comarca. Por eso, hasta la localidad acudieron regidores de diferentes concellos y vecinos que quisieron compartir dos jornadas de fiesta. No solo ellos, también se acercaron al municipio representantes de Coristanco, localidad coruñesa unida con estas tierras por el cuidado de un producto con sello de identificación protegida.
Hubo desfile de carros tradicionales y xugadas de vacas, para recordar la manera tradicional de labrar la tierra, y también exposición y puestos de venta de patata; además de comida y cena popular. Y no faltaron, como es tradición, sus concursos especiales en los que distinguen tubérculos diferentes que destacan por alguna característica.
Las patatas que más llaman la atención son las raras. En especial se destacó la que acercó al concurso Cristina Martínez, de Trasmiras. De forma parecida al jengibre, el tubérculo parecía tener tentáculos. Una patata de difícil corte y aprovechamiento, pero simpática. Le siguieron las de Ángel -así se definió-, de Xinzo; y la de José Ramón Losada, un vecino de Maceda. Tuvo un reconocimiento especial la más grande. Pesó 1,98 kilos y pertenecía a Manuel Vences, de Vilar de Barrio. Los organizadores señalaron que en otras ediciones el tamaño superaba los dos kilos, pero que en esta ocasión las patatas fueron más pequeñas. El segundo puesto fue para el tubérculo de Alejandro Fernández, de Rairiz de Veiga, seguido del de Ángel de Morgade.
Los organizadores también premiaron la excelencia. Esa fue para la patata de Marta Díaz, de Xinzo, por su forma y tamaño. Le siguieron las de Noa Díaz, de Xinzo, y Ángel Gayoso, de Vilar de Barrio. Finalmente, hubo un apartado para el conjunto de productos de otoño. Ese fue para las amigas Martina, Cecilia y Gabriela, de Vilar de Barrio. Le siguieron los de María luz Ruibal de la misma localidad y los del colectivo Os Pontóns.