Opromar proveerá de proteína marina a los restaurantes sostenibles
06 oct 2020 . Actualizado a las 12:14 h.El mince, un alimento a base de músculo de pescado picado y de gran potencial culinario por su aportación de proteínas marinas de calidad, empezará a hacerse notar en los menús del Foro Profesional de Restauración Sostenible, una red de 400 establecimientos gastronómicos repartidos por toda España. Una alianza de los armadores marinenses asociados a Opromar y esta red de restaurantes servirá como paso más en la comercialización a gran escala del mince. Para dar a conocer este producto se celebró una exhibición en el aula gastronómica del Mercado de Sants, en Barcelona, a cargo de los restauradores Albert Mendiola y Sergio Gil, además de una charla de la nutricionista Blanca Esteve.
Esta actividad fue seguida por zoom por 25 profesionales, que pudieron comprobar las múltiples posibilidades de este producto para sus cartas. El mince es adecuado para elaborar croquetas, hamburguesas, nuggets, albóndigas, varitas o empanadas. Aspira a conquistar a niños y jóvenes, que son los más reacios a consumir pescado.
Desde Opromar se recuerda que hace menos de un siglo en Galicia, mariscos que se encuentran hoy en lo más alto de la tabla de productos más demandados, se utilizaban para abono de fincas, porque nadie se había fijado en ellos para su consumo al por mayor. La asociación marinense propone a los restauradores españoles la inclusión en sus platos del mince, procedente de especies de pescado menos conocidas pero igual de interesantes, señalando que esta proteína marina de calidad tiene una textura que permite su uso en numerosas recetas. Así pues, su ausencia de los menús españoles no se debe a cuestiones de calidad, sino de desconocimiento.
La difusión del mince y subsanar la falta de información sobre estas especies es, precisamente, uno de los objetivos de Opromar, organización que proveerá de este producto a los restaurantes sostenibles de este foro, seguros de que tiene un gran futuro culinario por delante. La exhibición en Sants revela este potencial gastronómico. Se trata de un producto marino «que no tiene escamas, ni espinas, es versátil y aporta proteína de calidad y una amplia de vitaminas minerales».
Francisco Teijeira, de Opromar, y Pablo Lafuente, de Sealab Solutions, explicaron ante los reresentantes de la alta cocina española el proceso de obtención, el trabajo previo de investigación y la apuesta de los armadores marinenses por una pesca sostenible. Y es que la utilización culinaria del mince cumple la función de dar salida a un producto cuyo potencial está por explotar. Se elabora con especies que la flota pesquera tiene la obligación de descargar, pero que no tienen salida comercial en la actualidad. Al poner en valor el mince, que se produce con estas especies sin demanda actual, se garantiza una utilización adecuada de un recurso que, de otra forma, no tendría apenas salida.