El centro de interpretación de las islas atlánticas, Ons, Cíes, Sálvora y Cortegada, es ya una referencia escolar
30 ago 2016 . Actualizado a las 05:10 h.Los archipiélagos de Cíes, Ons, Sálvora y Cortegada son uno de los mayores atractivos turísticos de Galicia, pero existe una forma de conocer sus secretos sin necesidad de coger en barco. Aunque muchos lo ignoran. Se trata del centro de interpretación del Parque Nacional de las Islas Atlánticas, que está situado en el edificio Cambón del Casco Vello vigués, a poco más de doscientos metros del puerto.
El director del parque nacional, José Antonio Fernández Bouzas, reparte su tiempo de trabajo entre las islas y esta sede. Tiene claro que los niños son los mejores relaciones públicas del centro, ya que la mayoría de visitas corresponden a colegios de toda Galicia. En tres años y medio de vida, el edificio se ha convertido en toda una referencia escolar. «Muchos padres vienen porque les traen los hijos, que previamente han realizado la visita, y son los niños los que ejercen como guías», cuenta. También tienen la culpa los domingos, cuando se celebran los talleres infantiles y los progenitores descubren las instalaciones.
La exposición permanente del centro de interpretación de las Islas Atlánticas ha variado poco desde que se inauguró en el año 2012. Muestra los valores naturales y culturales y la historia de los espacios protegidos de una forma didáctica, con maquetas, vídeos y fotografías. El director-conservador del parque nacional anuncia cambios. Se dirigirán principalmente a los niños, el público mayoritario, con juegos interactivos que permitan aprender a la vez que disfrutar. «Si no concienciamos a los niños sobre el valor de nuestras joyas naturales... mejor apaga y vámonos».
Anualmente, reciben entre 14.000 y 15.000 visitas. Además de los colegios, hay muchos grupos concertados. El pasado curso escolar pasaron por las instalaciones más de cien colegios: «La mayoría son de Vigo, Bueu, Vilagarcía y Ribeira, que son los ayuntamientos a los que pertenecen los archipiélagos», comenta Fernández. Y además de en el resto de Galicia, también se está haciendo un hueco fuera: «Incluso hay dos colegios de Madrid que nos han escogido por tercer año consecutivo como viaje de fin de curso».
Las instalaciones del Cambón están enfocadas como una exposición dinámica y en la que se prima el aprendizaje lúdico. Una de las partes más llamativas es la simulación del ambiente que hay en cada una de las cuatro islas que forman parte del parque nacional. «Si miras al suelo y al cielo puedes ver y escuchar lo mismo que si estuvieses allí», explica el director. Incluso organizan guías y actividades específicas en función de las peticiones que realiza cada colegio: «A veces nos dicen que están estudiando los ecosistemas o la historia del parque y enfocamos la jornada hacia ese tema», dice. Durante la época de invierno y otoño, la sede cuenta con seis guías en plantilla, que también trabajan en las islas.
Un colectivo al que se presta especial atención es el de las personas con discapacidad. El museo cuenta con piezas en relieve para aprender a través del tacto. «No solo sirve para personas invidentes, también para que los niños sientan cómo aprende una persona que no ve», señala José Antonio Fernández.
Proyecciones en el salón de actos, concursos y exposiciones de pintura, fotografía y otras actividades complementan la programación para conocer mejor los lugares de Galicia que cuentan con una mayor protección por ley. Sin necesidad de navegar o de que haya buen tiempo.