Rita, de 79 años de edad, permanecía ingresada en el hospital Álvaro Cunqueiro desde el día 2 de enero
16 ene 2025 . Actualizado a las 21:15 h.El alcalde de Cotobade, Jorge Cubela, confirmaba esta tarde de jueves una triste noticia: el fallecimiento de Rita, la vecina del municipio que el día 2 de enero quedó al borde de la muerte tras una brutal paliza supuestamente propinada por su hijo Toño, de 46 años de edad, detenido poco después.
La mujer llevaba desde el día del ataque ingresada en el Álvaro Cunqueiro. Su situación era muy crítica desde el minuto cero y los sanitarios que la atendieron en el lugar de los hechos creyeron que ni siquiera podría llegar con vida al hospital. Pero sí lo hizo, llegando incluso a tener una leve mejoría hace unos días. Finalmente, y como confirmó el regidor, que es amigo íntimo de la familia, falleció a causa de la brutal paliza recibida. Su hijo y presunto agresor continúa ingresado en la unidad de psiquiatría del Hospital Provincial de Pontevedra. Lo internaron allí tras su detención sin poder siquiera tomarle declaración porque estaba fuera de sí.
Los hechos ocurrieron el día 2 de enero en la aldea de Vila de Abaixo, a plena luz del día. Toño, que vivía en el municipio de Barro (a media hora en coche) llevaba unos días comportándose de forma errática, algo que había llamado la atención de sus vecinos, ya que de cara a la galería siempre había sido una persona cabal. El hombre se pasó la mañana en bata de casa, en el balcón de su piso, gritando. Luego debió desplazarse a casa de su madre. Puede que alguien le llevase hasta allí porque su coche estaba aparcado en Barro tras el suceso. Sea como fuere, llegó a Vila de Abaixo y, supuestamente, le dio una paliza descomunal a su madre, con la que aparentemente tenía buena relación hasta entonces. La mujer quedó malherida y con el cráneo destrozado.
Fue la cartera la que, al ver lo que le había sucedido a la buena de Rita, a la que todo el mundo quería en Cotobade, dio la voz de alerta al vecindario. Se avisó al 112 y cuando llegaron los efectivos de emergencias nadie podía creer que la mujer siguiese viva con los golpes que tenía.
El suceso adquirió tintes aún más dramáticos cuando se empezó a sospechar que el agresor era su hijo,al que algún vecino había visto salir de la casa hablando por teléfono. Sorprendentemente, al cabo de un rato, mientras se le prestaba auxilio a su madre, el hijo apareció en escena como si no hubiese pasado nada. Preguntó qué había ocurrido y, tras identificarlo los vecinos, fue detenido por la Guardia Civil acusado de un homicidio en grado de tentativa.
Su madre fue ingresada en el hospital de Vigo y él en el de Pontevedra. Este jueves Rita ha fallecido, así que el delito pasa a tener unas consecuencias ya irreversibles.