Rescatados en Marín dos perros que agonizaban en un coche mientras su dueño estaba en una comida familiar

Alfredo López Penide
López Penide MARÍN / LA VOZ

MARÍN

POLICÍA LOCAL DE MARÍN

Los canes estaban deshidratados y la Policía Local tuvo que romper la ventanilla del turismo

21 jul 2019 . Actualizado a las 20:42 h.

Un nuevo olvido ha estado a punto de costarle la vida a dos perros. Y es que un vecino de Marín se marchó a una comida familiar dejando a sus dos mascotas de pequeño tamaño en el interior de su coche a pleno sol.

De este modo, minutos antes de las cinco de la tarde, varios viandantes alertaron a la Policía Local de que en el estacionamiento público Antonio Blanco, que discurre en paralelo a la Escuela Naval Militar de Marín, hay dos perros dentro de un turismo estacionado que están deshidratados y sus vidas corren peligro. A los pocos minutos, los componentes de una patrulla municipal corroboraron la denuncia, si bien inicialmente solo observan en el interior del coche a un perro, eso sí, con signos de deshidratación.

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En un primer momento, se intentó localizar al propietario del vehículo, pesquisas que no fructificaron. A estas labores se sumó la Policía Nacional, al tiempo que, en transcurso de un examen más minucioso, consiguieron localizar un segundo que no se movía y, aparentemente, estaba inconsciente.

Ante la urgencia, los agentes rompieron una ventanilla para, de inmediato, mojarles con agua para bajarles la temperatura corporal. Al tiempo, solicitaron la colaboración de una veterinaria con la que trabaja habitualmente el Concello de Marín. La facultativo les insta a que trasladen a los perros a la clínica sita en esta localidad.

Durante todo el trayecto, los policías mantienen el contacto con la veterinaria mientras siguen intentando recuperar a uno de los perros, logrando que reaccione justo antes de llegar a la clínica.

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Paralelamente, se consigue localizar al propietario de los animales, quien se desplaza hasta el centro veterinario. La Policía Local sospecha que el dueño acudió a una comida familiar y se olvidó de los animales, si bien desde que supo lo ocurrido se mostró muy afectado. No obstante, esto no evitó que la policía tramitase las pertinentes denuncias administrativas por lo ocurrido.

En cuanto a los canes, uno ya se ha recuperado, mientras que el segundo permanecerá ingresado, por lo menos, hasta el domingo. En todo caso, se espera que se recupere satisfactoriamente.