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Adiós a Nieves Martínez, con 104 años recién cumplidos, peluquera pionera en Marín y rapada en la Guerra Civil

Marcos Gago Otero
Marcos Gago MARÍN / LA VOZ

MARÍN

Nieves Martínez Rodríguez, en el sofá de su casa, con sus hijas y la diputada provincial María Ortega
Nieves Martínez Rodríguez, en el sofá de su casa, con sus hijas y la diputada provincial María Ortega DIPUTACIÓN DE PONTEVEDRA

Esta mujer fue la primera donante de fotos de memoria histórica en la campaña «Cae de Caixón» de la Diputación

16 ago 2023 . Actualizado a las 18:19 h.

La vida de Nieves Martínez Rodríguez, al menos algunas de sus experiencias vitales, representa por sí sola la historia de España del siglo XX y las grandes transformaciones sociales que se vivieron en su Marín natal. Falleció este martes, a solo diez días después de cumplir los 104 años, y con ella se va el testimonio vivo de una época. Nació el 5 de agosto de 1919, hija de Modesto y Antonia, en el barrio de pescadores de A Banda do Río. Cuando era niña el papel de las mujeres eran las tareas del hogar. Cuando se hizo mayor y ya casada, no se conformó y abrió una peluquería, Nieves, que estuvo entre las más concurridas de Marín y que le valió a su hija Alicia como experiencia para poder dar un salto profesional mucho mayor en Madrid, como relata otra de sus hijas, Emma.

El padre de Nieves Martínez, Modesto, fue concejal durante la Segunda República, y eso le valió a sus enemigos para intentar acabar con él. Logró librarse la primera vez de un final fatal en un paseillo y se fue de Marín durante un tiempo. La segunda vez que fueron a por él, no lo encontraron en casa y los fascistas entonces se vengaron en sus hijas, rapándolas. Para escapar del escarnio público que suponía, su familia las envió a Tui, donde tenían un tío. Allí estuvieron hasta que les creció el pelo y volvieron a Marín. Esta historia, así como documentos y fotos que donó, estrenó la campaña «Cae de Caixón», impulsado por María Ortega (BNG), la diputada de Memoria Histórica del exgobierno de izquierdas de la Diputación de Pontevedra. Emma Otero, hija de Nieves, recuerda que su madre tenía cuando la raparon 16 años y que se lo tomó con calma: «Ella no lo vivió como un drama, hasta se encontró guapa cuando le raparon el pelo, y hoy en día lo recordaba riéndose como una anécdota, así como su hermana lloró mucho. Hablaba de un alemán que se reía de ellas y vería a su hermana llorar y se burlaba diciendo 'no le cortéis el pelo a estas niñas, cortádmelo a mí'». María Ortega quiso agradecer públicamente una vez más esa donación de fotos y documentos a la Diputación por ser «unha persoa xenerosa».

Nieves Martínez se casó a los 20 años con Jenaro Otero, que era mecánico en el Tiro Naval Janer. Tuvieron cuatro hijos: Nieves, Alicia, Genaro y Emma. Emprendedora y empujada también por la necesidad de ingresos mayores para atender una familia creciente, durante un tiempo fue a Pontevedra todos los días a aprender peluquería, con vistas a abrir su propio establecimiento en Marín. Varias generaciones de vecinos de A Banda do Río pasaron por esta peluquería, que se convirtió en una de las referencias del barrio. «Siempre fue una persona muy emprendedora», resalta su hija Emma. Jubilada y viuda, Nieves vivió un tiempo entre Madrid y Marín y finalmente, se fue a vivir con su hija Emma a Poio. «El carácter de mi madre era muy alegre, su vida la llevó bien dentro de todas las penurias que pasó, pero fue una persona muy emprendedora». Su hija añade: «Ella nació en agosto y murió en agosto, que para mi madre es el mes más alegre, el más luminoso».