El subdelegado de Defensa destaca que la isla «se abre al resto de ciudadanos»
02 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.«O 1 de marzo do 2022 quedará gravado con letras de ouro na historia do noso municipio». Con estas palabras, Gregorio Agís se congratuló de la firma de la concesión demanial por la que el Concello de Poio asume la gestión de la isla de Tambo, un hecho que todos los asistentes al acto calificaron como «histórico».
La rubrica del convenio fue el colofón a años de negociaciones con el Ministerio de Defensa, si bien queda aún mucho trabajo por delante. De hecho, el concejal de Promoción Económica no dudó en realizar un llamamiento para que definir entre todos «o futuro que queremos para a nosa illa, como vamos a potexela, como vamos a recuperala, como a vamos rehabilitar, como vamos a poñer en valor a súa historia, o seu patrimonio, os seus valores ambientais...», al tiempo que se congratuló de la implicación de las distintas Administraciones, partidos políticos o colectivos ciudadanos, así como de la Escuela Naval Militar de Marín: «Grazas por entregarnos esta xoia intacta, conservada no tempo. Sabemos que quedou a salvo dos procesos especulativos grazas a vosa custodia», añadió.
«Tambo é o faro da ría de Pontevedra», remarcó, al tiempo que glosó los innumerables atractivos que tiene la isla, así como sus potencialidades. De este modo, Agís se mostró convencido de que «se consolidará como un punto de referencia turístico, ambiental e cultural. Tambo forma parte do imaxinaria colectivo de Poio (...) Tambo agora é noso, coidémolo».
Por su parte, el subdelegado de Defensa, Constantino Miguel Cortés Calvo, rememoró que el proceso que se consolidó este martes tuvo su origen en el 2002 cuando Defensa decretó la desafectación de la ínsula. Desde entonces la custodia de este enclave de la ría de Pontevedra estuvo en manos de la Escuela Naval Militar —«todos los oficiales de la Armada que han pasado por la Escuela, han pasado por la isla»—.
Cortés Calvo asumió que los vecinos de Poio han sentido la isla «como suya. Inaccesible. Gracias a Gregorio Agís, al trabajo que ha desarrollado este último año, que es el que he compartido con él, hemos llegado al día de hoy en el que, por fin, se accede a la isla. No es que se la quite Defensa de en medio, es que se abre al resto de ciudadanos».
A este respecto, el alcalde Luciano Sobral reconoció que «o camiño non foi doado», de tal modo que «o que parecía imposible tornouse en realidade». Tanto el regidor municipal como la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, pusieron el acento en la colaboración institucional para consumar la transferencia de la isla al Concello de Poio. En principio, la concesión es por un período de veinticinco años prorrogables, si bien desde el gobierno local tienen el convencimiento de que antes de que finalice este primer plazo se habrá completado totalmente la transferencia.
El delegado del Gobierno, José Miñones, quien se considera «de Poio de adopción». «Son xa cinco décadas as que levo, non so veraneando, senón indo a esta fermosa terra durante moitos meses do ano». Remarcó que «despois de setenta anos poñémola a disposición non só da veciñanza, senón dos miles de visitantes que se achegan cada ano a esta marabillosa terra». En su intervención, subrayó que «Poio vai incrementar aínda moito máis o seu xa enorme potencial turístico e vai dispoñer dun novo espazo protexido».
El subdelegado de Defensa resalta que «el proyecto de Poio para la isla es impresionante»
Fue uno de los momentos más simbólicos de la jornada. Tras la firma de la concesión de Tambo, la comitiva se desplazó hasta la isla. Nada más desembarcar, procedieron a tapar los carteles de «Prohibido el paso. Zona militar» por otros con el nombre de este enclave y su imagen.
Y si complicado fue el proceso para lograr la cesión, otro tanto se puede decir del trabajo que el Concello tiene por delante. Lo más prioritario es acometer una limpieza y saneamiento, así como la adecuación del entorno para que el próximo mes de mayo comiencen las visitas autorizadas.
En paralelo, está previsto sacar adelante un plan de usos o solicitar su catalogación como Espazo Natural de Interese Local (ENIL). A este respecto, el subdelegado de Defensa, Constantino Miguel Cortés Calvo, resaltó que «el proyecto que tiene Poio para la isla es impresionante. Está hecho con una ilusión tremenda y, efectivamente, el papel lo aguanta todo y es ahora cuando empieza el trabajo de verdad».
Es por ello que tanto el alcalde Luciano Sobral como la presidenta provincial hicieron un llamamiento a la implicación de todas las Administraciones, que «temos que traballar da man para que pasen moitas cousas nesta illa, cousas fermosas». «Din que as illas son bicos no medio do océano e hoxe este bico vai ser un bico compartido. Vamos poder bicarnos todos en torno á illa de Tambo, que se converte nun patrimonio para a cidadanía», apuntó Carmela Silva.
Se tendrá que establecer el futuro de los inmuebles, algunos de los cuales, caso de la cantina, se demolerán, mientras que otros, como el lazareto, la capilla o el polvorín, se rehabilitarán.